A un año del sismo del 19 de septiembre, el centro de acopio de Lago Tanganica 67 todavía mantiene sus puertas abiertas y trabaja a favor de los damnificados.
Un lago que todavía ofrece vida a los damnificados
“Compadre, ¿Cómo te cuento un año de trabajo en 15 minutos?”, dice entre risas Forastero, uno de los encargados de Lago Tanganica 67, el único centro de acopio privado que se mantiene activo en la Ciudad de México para apoyar a los damnificados del sismo del 19 de septiembre.
Ese martes del 2017, el Servicio Sismológico Nacional (SSN) reportó un movimiento telúrico con magnitud 7.1 localizado a 12 kilómetros al sureste de Axochiapan, Morelos.
Semanas antes salí del Playa del Carmen con destino a la ciudad porque mi vida estaba hecha escombros. El día del sismo tomé la camioneta de mi papá, y llegué a Lago Tanganica sin dinero ni trabajo, sólo tenía los bolsillos llenos de ganas de ayudar.
Diario cerca de mil personas trabajaron como voluntarios en Lago Tanganica 67. (Foto: Michael Soberanes)
Forastero, apodo de un voluntario de Lago que solicitó anonimato, lleva casi un año organizando acopio, empaques y observando la distribución de bienes a damnificados en al menos siete estados de la república. Por sus manos pasaron varias toneladas de víveres, y por sus ojeras cruzaron indefinidas noches sin descansar ante la emergencia.
Actualmente, la bodega de acopio se encuentra en la misma calle, pero en el número 23. (Foto: Cultura Colectiva News / Gustavo Pineda)
Organizar a 10 mil voluntarios y transportar más de 12 mil toneladas de ayuda
Tras el movimiento telúrico que sacudió el centro y sur del país, la solidaridad de los mexicanos fue el corazón y soporte de la ayuda humanitaria, mientras que Lago Tanganica 67 se convirtió en uno de los tantos centros de acopio para organizar a los voluntarios.
La idea nació de los cineastas Oliver Castro y Diego Luna. Poco a poco distintos artistas se sumaron a la iniciativa, provocando la donación de dinero, acopio y principalmente manos. Forastero recuerda cómo familias enteras llegaron del alba al ocaso con la intención de apoyar.
Durante los primeros meses del sismo, cerca de 10 mil voluntarios participaron para brindar apoyo en Lago Tanganica 67. (Foto: Cortesía / Lago Tanganica 67)
Susan, voluntaria de Lago Tanganica, observa con nostalgia el actual vacío de la bodega donde hace un año tenían un sistema de relevo y turnos las 24 horas. Los encargados eran ciudadanos con responsabilidades bien definidas, donde todos confiaban en la persona de a lado.
Forastero es testigo de la entrega de 12 mil toneladas de acopio a los siete estados más afectados del sismo. (Foto: Cultura Colectiva News / Gustavo Pineda)
Además, Susan relató que para los voluntarios de Lago no existieron límites ni barrera al momento de llegar a la ciudadanía.
Recuerdo que en los primeros días del sismo estuve sentada frente a Diego Luna, y platicamos que estaban asaltados varios camiones de camino a Jojutla en Oaxaca. Nos dijo qué tan rápido podríamos llenar un avión con víveres, y lo hicimos.
Susan relata que la responsabilidad fue una de las principales aptitudes de los voluntarios en Lago para acelerar la entrega de apoyo a los damnificados. (Foto: Cultura Colectiva News / Gustavo Pineda)
Ambos relataron a Cultura Colectiva News, cómo trabajaron con más de 10 mil voluntarios a empacar, organizar y ofrecer ayuda humanitaria de ciudadano a ciudadano.
Teníamos reglas básicas. Sólo trabajamos con voluntarios y civiles, no aceptamos a ningún representante de gobierno ni asociaciones para evitar usen los víveres para posar frente a la gente. Todos aquí somos voluntarios y es una iniciativa privada que continúa trabajando.
Susan y Forastero detallaron que Lago Tanganica 67 transportó más de 12 mil toneladas de ayuda del sismo hasta la fecha. (Foto: Cultura Colectiva / Gustavo Pineda)
La puerta sigue y seguirá abierta a la ayuda
En la bodega brilla el letrero color azul de Lago Tanganica 67, en la emergencia entraban y salían mil voluntarios a diario. Forastero inició como transportista para llevar medicamentos controlados a los centro de acopio de distintas comunidades, después creció de puesto hasta coordinar a otros transportistas y ahora es uno de encargados.
Según las cifras tan sólo en Oaxaca del primer terremoto, todavía hay 79 mil familias sin ayuda y que todavía viven en la calle. Yo lo vi en la sierra, es verdad. Hace falta ayudar, hay muchos movimientos que están donando su tiempo y habilidad para apoyar a la gente.
Lago Tanganica 67 actualmente forma parte de la alianza con Brigada MX, una plataforma para transparentar la reconstrucción. (Foto: Cultura Colectiva News / Gustavo Pineda)
El centro de acopio continúa abierto, pero la bodega cambió al número 23 de la misma calle.
De cara al aniversario el sismo, Forastero opina que el 19 de septiembre debe convertirse en el Día del Voluntario, con el objetivo que la gente salga a las calles para donar y salir a las calles.
Es un día para guardar respeto por las personas que fallecieron, pero también hay lucir ese respeto por todas las personas que donaron y que lo siguen haciendo, para promover un día al año que podemos volver a hacer esa unión de mexicanos ayudando a quien lo necesite.
Aunque el voluntario disminuyó, sin embargo, las donaciones para la reconstrucción todavía son indispensables. (Foto: Facebook)
El lago todavía fluye y ofrece agua a los más necesitados, sin embargo, hoy son una alianza con la plataforma digital Brigada MX, una herramienta que presentó el cineasta Alfonso Cuarón para coordinar y transparentar la reconstrucción del país.
En Brigada MX, son 174 organizaciones que invirtieron mil 199 millones de pesos en 259 proyectos para observar el renacimiento de cientos de nuevas viviendas en los estados más afectados por el sismo.
«Amurallar el propio sufrimiento es arriesgarte a que te devore desde el interior»; Frida Kahlo. Esta bandera fue el símbolo de Lago Tanganica 67. (Foto: Cultura Colectiva News / Gustavo Pineda)
La emergencia todavía huele a polvo fresco, la necesidad sigue activa. Por ello, los voluntarios piden a la ciudadanía que se levanten como ese martes 19 de septiembre para donar, y enfocar esfuerzos en 135 comunidades dañadas y con carencias sociales.
Como lo dice Diego Luna en una entrevista en Estados Unidos. ‘Lo bueno de esto es que pensarías que las personas correrían al lado opuesto de la nube de polvo, pero fue todo lo contrario. Todos corriendo hacia ella para intentar salvar a alguien’.
Estos son los testimonios #AUnAño19S, una serie de historias sobre las personas que apoyaron durante el pasado sismo del 19 de septiembre.
FUENTE: CULTURA COLECTIVA
