Observas a tu bebé dormir plácidamente y de pronto, sin razón aparente, empieza a llorar inconsolablemente aunque sigue dormido. Se trata de un trastorno del sueño del pequeño que desaparece con el paso del tiempo.
Muchas madres se cuestionan si los bebés lloran dormidos, pues el sueño del bebé es un tema de mucha preocupación. El descanso de los pequeños influye en la alteración del estado de ánimo y comportamiento del niño. Además, repercute de manera irreversible en el bienestar de la madre.
Lo primero que debes tener presente es que si tu bebé quiere comunicarse contigo lo hará mediante el llanto o la queja. Por lo tanto, ellos tienden a llorar para hacerte saber que les ocurre algo y requieren de tu atención.
Es posible que alguna vez el llanto del bebé te haya despertado en medio de la noche y hayas pensado que necesitaba atención. Para tu sorpresa no era así, pues sus ojos permanecían cerrados y seguía dormido. Esta situación es más común de lo que imaginas, pero muchas madres no saben qué hacer ante estos casos.
¿Por qué los bebés lloran dormidos?
En los primeros años del bebé, es habitual que se despierte con frecuencia durante la noche. Los bebés tienen un ciclo del sueño diferente al de los adultos.
En reiteradas ocasiones, a los bebés se les dificulta conciliar el sueño aunque se sientan agotados; esto provoca que lloren mientras duermen. Algunos hasta intentan retomar el sueño, pero no lo consiguen porque no saben cómo hacerlo. ¿La razón? Te necesitan.
Las pesadillas también son otra razón por la que los bebés lloran dormidos.Así como los adultos, ellos sueñan y la mayor parte de sus sueños están asociados a las experiencias vividas.
Trastornos del sueño en los bebés
El bebé pasa por varias fases del sueño que forman parte de su proceso de desarrollo, como los despertares nocturnos. Estos pueden llegar a ser leves, como cuando el bebé emite un sollozo o un suave gemido.
No obstante, puede surgir el llanto que es más perseverante y angustioso y que, por ende, causa mas alteración en el niño. Esto se conoce como terrores nocturnos.
En ambas circunstancias se repite el mismo comportamiento: cuando la madre acude a atender a su bebé, corrobora que, aunque este está llorando, continúa dormido. El motivo de este trastorno se da cuando el bebé está la fase de sueño lento, también llamado No-REM.
En la fase No-REM, el bebé está sumergido en lo más profundo del sueño. Por tanto, no es capaz de despertarse completamente y no toma conciencia plena de lo que pasa.
Cuando los bebés lloran dormidos pueden sentirse agitados, confundidos y asustados y son incapaces de reaccionar a los estímulos externos. Los terrores nocturnos son de períodos cortos; duran unos pocos minutos, después de los cuales el bebé se queda dormido nuevamente.
En tanto, cuando se trata del despertar confusional, este puede tardar alrededor de 5 a 15 minutos. Si se intenta consolar al bebé, la situación empeora y se alarga más el episodio.
¿Qué hacer para calmar el llanto del bebé si aún está dormido?
Si tu bebé llora pero tiene los ojos cerrados, lo ideal es que tengas paciencia, esperes y lo observes. El hecho de que llore o haga algún ruido no implica que quiera despertarse. Mientras tenga los ojos cerrados, es señal de que sigue dormido.
Es primordial prestar atención al sonido del llanto cuando los bebés lloran dormidos; así se determinará qué clase de necesidad tienen. Puede que tenga frío o hambre, y si sus necesidades básicas no se satisfacen, no podrá conciliar rápidamente el sueño. Es esencial que siempre le atiendas al momento para que se sienta mejor.
“Cuando los bebés lloran dormidos pueden sentirse agitados, confundidos y asustados y son incapaces de reaccionar a los estímulos externos”
Cuando sucedan estos despertares en la madrugada, deberán ser en silencio y en calma para no despertar más al bebé. Atiende sus necesidades con una luz tenue y evita encender luces brillantes para que entienda que durante la noche debe dormir.
Finalmente, toma en cuenta que, si tu bebé hace algún ruido al dormir, es absolutamente normal. Por otra parte, si el pequeño llora o se queja, deberás mirarlo para verificar si se encuentra despierto o no.
Consejo para la madre
La sugerencia más importante es que no trates de despertar al niño durante estos incidentes nocturnos. Una estrategia clave es que te quedes en silencio junto a él y esperes a que se tranquilice.
En definitiva, puede que estos despertares se produzcan espontáneamente, pero también pueden ser causados por algunos estímulos del exterior. Por ejemplo, podrían ser provocados por algún ruido persistente o un cambio de posición en la cama. De allí que se recomienda evitar cualquier tipo de alteración durante las horas de descanso.
FUENTE: ERES MAMA