La Procuraduría de Protección Ambiental de Quintana Roo inició nueve expedientes de denuncias por daño ambiental, a causa de los incendios provocados que ponen en riesgo los recursos naturales de la selva maya.
Rosaura Gutiérrez, oficial de Información Pública del Equipo Estatal de Manejo de Incendios, indicó que los principales indicios se deben a la caza furtiva de especies como el jaguar o el venado.
Explicó que los cazadores han sido identificados vía aérea y en algunos sitios se ha localizado equipo de caza con combustible, sin embargo, hasta el momento no hay ninguna persona aprehendida o sancionada.
La Ley de Quemas y Prevención de Incendios Forestales para el Estado de Quintana Roo establece multas de hasta 1000 veces el salario mínimo vigente, pero esta sanción hace referencia únicamente a quienes no acaten las normas para las quemas agrícolas controladas.
Además, prevé la revocación de permisos de quema y la eliminación del padrón de subsidios para el campo.
Con respecto a la caza furtiva, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) contempla una pena de uno a nueve años de prisión y el equivalente de 300 a mil días de multa, de acuerdo al valor de la Unidad de Medida y Actualización (UMA). En este momento, la suma podría oscilar entre los 86 mil pesos.
Además, establece una pena adicional hasta de tres años más de prisión y hasta mil días multa adicionales, cuando las conductas se realicen o tengan efectos sobre un área natural protegida, o cuando se realicen con fines comerciales, como es el caso.
De los 43 incendios reportados hasta el momento, por lo menos 13 han sido identificados como consecuencia de la caza furtiva de especies, cuyo modus operandi es quemar hectáreas de pastizal y selva para que, cuando comience a reverdecer, los animales comienzan a salir y queden expuestos.
En otras posibles causas identificadas, ocho incendios se propagaron por quemas en los basureros; seis incendios derivaron presuntamente de accidentes provocados por fumadores y cinco relacionados con las quemas agropecuarias.
En 2019, más de 13 mil hectáreas de matorral y selva se consumieron en los incendios, principalmente en la Reserva de la Biosfera de Sian Ka’an. Para esta temporada, se tiene un recuento superior a nueve mil hectáreas de vegetación afectadas en la entidad.
FUENTE: Sipse