El incremento en la falta de acceso a alimentos nutritivos tras la crisis económica ocasionada por la pandemia de COVID-19 provocará que la población de Quintana Roo sea más vulnerable a enfermedades, como la que causa el virus SARS-CoV2.
María Soledad Villarreal, presidenta del Colegio de Nutriólogos en el estado, señaló que la falta de nutrientes impide el desarrollo de un sistema inmune fuerte y facilita la aparición de padecimientos como la diabetes y la desnutrición.
“La gente que se contagie de COVID y que esté desnutrida tiene mayores probabilidades de complicarse y en general las personas van a empezar a enfermar más de influenza, gripe y todos los virus y bacterias que andan rondando van a tener un mayor impacto porque el sistema inmunitario va a estar totalmente decaído entonces cualquier enfermedad tiene mayor complicación”, dijo.
La especialista explicó que los principales afectados por problemas de desnutrición serán los niños menores de cinco años, problema que no siempre se manifiesta en un bajo peso.
“En la infancia es muy grave la desnutrición porque todas las carencias que tengas en esta etapa van a condicionar tu vulnerabilidad o resiliencia en la adolescencia y en la adultez, entonces se deja una huella en los niños que no podemos revertir, porque va a tener mayor predisposición a enfermarse y un menor desarrollo cognitivo”, dijo.
De acuerdo con el Informe Anual sobre la Evaluación de Pobreza y Rezago Social 2020 que realiza el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), el 10% (175 mil 414) del millón 754 mil 144 habitantes del estado tienen carencia de alimentos, los cuales se concentran en los municipios de Bacalar (36%), Felipe Carrillo Puerto (23.6%), Benito Juárez (23.3%) y Othón P. Blanco (23.1%).
Debido a esto, el Consejo emitió diversas recomendaciones al gobierno federal para que en la integración del presupuesto de egresos se incluyan recursos para implementar alternativas para mitigar los efectos de la pandemia.
“Se identificaron 30 programas relevantes para la atención del derecho a la alimentación nutritiva y de calidad: 13 con fuerte contribución, nueve con mediana y ocho que contribuyen ligeramente. Esto quiere decir que de los 149 programas sociales que operan en 2020, poco más de 20% contribuyen al acceso efectivo de este derecho”, indicó Coneval.
FUENTE: Sipse