¿Han tenido sueños que se sienten más reales que la propia vida? ¿Cuando despiertan recuerdan poco de lo que soñaron o solo algunos fragmentos? Recientemente investigadores de la Universidad Northwestern, en Estados Unidos, publicaron los resultados de un estudio en el que lograron establecer un dialogo en tiempo real con una persona que estaba dormida, teniendo un sueño lúcido.
Sí, un diálogo bidireccional, es decir que obtuvieron respuestas.
¿Cómo, cómo?
Uno de los obstáculos para los neurocientíficos que estudian los sueños es que al despertar, muchas personas no recuerdan por completo lo que soñaron o de plano no registran nada de lo que soñaron en su memoria.
Es por eso que la capacidad de comunicarse con los soñadores en tiempo real para que puedan describir sus experiencias mientras están en el sueño amplía enormemente las posibilidades de explorar científicamente las experiencias oníricas.
Durante esta investigación, los científicos estudiaron los sueños durante el sueño de Movimientos Oculares Rápidos (REM) de 36 personas. Algunos no tenían experiencias previas con sueños lúcidos y otros eran soñadores lúcidos frecuentes. Un sueño lúcido es cuando una persona está consciente de que está soñando, por lo que puede registrar en su memoria las experiencias y posteriormente, al despertar, las recuerda.
Durante el sueño REM, los individuos que participaron en el estudio demostraron varias capacidades como por ejemplo la realización de análisis perceptivos de información nueva, el mantenimiento de la información en la memoria de trabajo, el cálculo de respuestas simples e incluso la expresión de respuestas.
Estas respuestas incluyeron movimientos oculares distintivos y construcciones musculares faciales selectivas que 6 de los voluntarios evaluados respondieron correctamente en 29 ocasiones.
Cuando los voluntarios estaban más profundamente dormidos, en siestas de 90 minutos, los científicos realizaron preguntas simples mediante bocinas, estimulando la respuesta con luces e incluso con un estímulo táctil en las manos.
Los soñadores lúcidos pudieron seguir instrucciones para calcular operaciones matemáticas, responder preguntas de sí o no e incluso discriminar estímulos en las modalidades visual, táctil y auditiva.
Esto representa un avance importantísimo en el estudio de los sueños aunque no es la primera vez que se logra. Anteriormente ya había estudios con resultados similares en Alemania, Francia, Países Bajos y otras partes de Estados Unidos.
fuente: sopitas