La OTAN condena la invasión y reafirma su disposición a responder de manera conjunta si se produce un ataque exterior contra cualquier aliado
La Unión Europea ha reaccionado de inmediato al ataque del presidente ruso, Vladímir Putin, a Ucrania.
“Una vez más en el centro de Europa, mujeres, hombres y niños inocentes están muriendo o temen por su vida. Condenamos este ataque bárbaro”, ha denunciado con gesto grave la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en una comparecencia este jueves poco después de que Putin lanzara de madrugada una incursión militar en toda regla en Ucrania, atravesando varios puntos de la frontera del país.
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Los Veintisiete se han citado este jueves en Bruselas en una cumbre extraordinaria de jefes de Estado y de Gobierno convocada de forma urgente para aprobar una nueva batería de sanciones de “graves y enormes consecuencias” para Moscú. “El presidente Putin está tratando de volver a los tiempos del Imperio Ruso”, ha subrayado Von der Leyen.
El objetivo de la nueva ronda de sanciones, que llega después de las aprobadas el miércoles, será debilitar y degradar gravemente la economía rusa, acabar con sus posibilidades de crecimiento y cerrar el paso de su industria a las tecnologías clave para competir en el siglo XXI.
Fuentes diplomáticas apuntan que, aun así, la nueva batería no agotará el margen de represalias con el que Bruselas cree contar. Según esas fuentes, la UE se reserva todavía munición a la espera de las acciones que pueda acometer Putin.
Está previsto que la segunda andanada, que se ha mantenido bajo llave y en secreto durante semanas, sea pactada este mismo jueves por la noche en una cumbre europea extraordinaria, convocada el miércoles ante la creciente amenaza de una invasión.
Fuentes comunitarias confían en obtener el visto bueno, aunque países como Italia, Hungría o Chipre temen las repercusiones de las sanciones en sus propias economías.
El primer pilar de las sanciones será financiero. Y según ha detallado Von der Leyen, busca “acabar con el crecimiento de Rusia, incrementar sus costes de financiación, aumentar la inflación e intensificar la salida de capitales”. Y el segundo pilar, según la presidenta de la Comisión, intentará cortar el acceso a tecnologías imprescindibles, como componentes de gran valor añadido o software, “de las que la élite [rusa] obtiene gran parte de sus beneficios”, según la dirigente comunitaria.
Moscú afronta el castigo con una situación financiera mucho más fuerte que en 2014, cuando la UE y EE UU aprobaron represalias comerciales por la anexión de la península ucrania de Crimea.
El Kremlin ha logrado acumular un fondo soberano que, a 1 de febrero, sumaba 174.900 millones de dólares (157.140 millones de euros). Aun así, su economía es frágil, la inflación se ha situado este mes en el 8,8%, y los tipos de interés del Banco de Rusia, en el 9,5%. Von der Leyen se ha mostrado convencida de que el golpe occidental “degradará seriamente la economía en todas las áreas y es el presidente Putin quien tendrá que explicárselo a sus ciudadanos”.
Las represalias, según ha detallado la jefa del Ejecutivo comunitario, pretende golpear los intereses del Kremlin y su capacidad de financiar la guerra, y apunta hacia sectores estratégicos de la economía rusa, bloqueando su acceso a tecnologías y a mercados claves para Rusia.
“Debilitaremos la base económica rusa y su capacidad de modernización y, además, congelaremos los activos rusos en la UE y detendremos el acceso de los bancos rusos a los mercados financieros europeos”, ha dicho Von der Leyen, quien ha explicado que las medidas se toman de forma “alineada” con Estados Unidos, Reino Unido y Canadá, y también con otros aliados como Japón y Australia.
Además de sanciones, la UE lleva semanas preparando planes de contingencia para paliar los efectos que estas penas y un eventual golpe de contramedidas de Moscú puedan tener sobre la Unión.
Estas medidas de emergencia, también mantenidas en secreto, se centran sobre todo en el sector energético (los Veintisiete importan un 40% de su gas desde Rusia, y es también altamente dependiente del petróleo ruso), con herramientas extraordinarias para atajar alzas de precios radicales y fórmulas de aprovisionamiento alternativas, y tiene también muy en cuenta una posible crisis de refugiados que huyan del conflicto ucranio.
Reunión urgente de la OTAN
El Consejo Atlántico de la OTAN también ha celebrado a primera hora de este jueves un encuentro urgente para condenar el ataque ruso.
La reunión de consultas, a petición de varios aliados del este (Polonia, Bulgaria y los países bálticos, entre otros) se ha celebrado con base en el artículo 4 del Tratado de la Alianza, que se activa en caso de amenazas graves. Y los aliados occidentales han advertido en un comunicado que mantienen un compromiso con el artículo 5, que garantiza una respuesta militar conjunta en caso de ataque exterior contra uno de ellos.
“Es un momento muy grave para la seguridad de Europa”, ha señalado el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, tras concluir la reunión de emergencia. Stoltenberg ha acusado a Putin de cometer “un acto brutal de guerra” y de llevar a cabo “una invasión preparada, a sangre fría, deliberada”.
La OTAN celebrará el viernes una cumbre de jefes de Estado y de Gobierno.
Stoltenberg ha anunciado que la Alianza ha activado sus planes de defensa, a petición de su máxima autoridad militar, el general Tod Wolters.
El secretario general cree que es una medida “prudente y defensiva”. Y ha recordado que la Alianza tiene “100 aviones en alerta” que protegen el espacio aéreo de sus miembros, y “más de 120 naves aliadas, desde el mar del Norte al Mediterráneo”.
“Son unas de las horas más oscuras para Europa desde la Segunda Guerra Mundial”, ha añadido el alto representante para la política Exterior de la UE, Josep Borrell, quien ha comparecido junto a la presidenta de la Comisión.
“Una gran potencia nuclear ha atacado un país vecino y está amenazando con tomar represalias contra cualquier país que acuda en su rescate”, ha expresado con palabras contundentes, calificando el ataque de “violación de los principios básicos de la coexistencia humana”.
Borrell ha censurado a Putin por su “grave y premeditada escalada, que ha conducido a la guerra” y ha reclamado que ponga fin a “esta agresión sin sentido”. Borrell y Von der Leyen han condenado de forma enérgica lo que consideran un ataque militar “sin precedentes” de Rusia contra Ucrania.
“Con sus acciones militares no provocadas e injustificadas, Rusia está violando gravemente el derecho internacional y socavando la seguridad y la estabilidad europeas y mundiales”, asegura un comunicado conjunto de Von der Leyen y del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, emitido también a primera hora de este jueves.
“Lamentamos la pérdida de vidas y el sufrimiento humano”, sigue el texto. Los Veintisiete también condenan “la participación de Bielorrusia en esta agresión contra Ucrania” y le exigen “que cumpla con sus obligaciones internacionales”, según un comunicado conjunto emitido este jueves.
La OTAN ha señalado que “los líderes rusos deberán asumir toda la responsabilidad por las consecuencias de sus actos”.
Y ha acusado al Kremlin de crear “una grave amenaza a la seguridad euroatlántica con graves consecuencias geoestratégicas”.
Los aliados reforzarán su presencia militar en los países del este de Europa y aseguran que “Rusia pagará un precio muy alto en términos económicos y políticos”.
FUENTE: EL PAÍS