“Ha sido una decisión difícil, pero creemos que es lo mejor para la empresa a largo plazo”, dice su consejero delegado
El consejero delegado de Amazon, Andy Jassy, ha anunciado este lunes el despido de 9.000 trabajadores más. La supresión de puestos se suma a los 18.000 empleos que la compañía ya anunció que iba a reducir. “Ha sido una decisión difícil, pero creemos que es lo mejor para la empresa a largo plazo”, ha dicho Jassy en una comunicación pública a la plantilla. Los nuevos despidos se concentrarán en las divisiones de computación en la nube, recursos humanos, publicidad y Twitch.
Con esta ronda, los despidos anunciados por el gigante del comercio electrónico y la computación en la nube ascienden a 27.000, una cifra récord en la historia del sector, y superan de nuevo a los de Meta, que se había destacado con la ronda de recortes anunciada la semana pasada. Es el mayor de todas las tecnológicas en términos absolutos, aunque en cifras relativas es de menos del 2% del total de los empleados, pues la empresa tiene en torno a 1,5 millones de trabajadores.
De las grandes tecnológicas, Meta es la que ha anunciado el mayor recorte de empleo en términos relativos. Su fundador, Mark Zuckerberg, anunció la semana pasada 10.000 despidos que se sumaban a los 11.000 ya anticipados en noviembre del año pasado. Esas dos rondas suponen casi el 25% de la plantilla, que cerró 2022 con unos 86.000 empleados.
La mayoría de las tecnológicas se lanzaron a una carrera de contrataciones en plena pandemia, cuando el cambio en los hábitos de los consumidores impulsó su negocio. Después, sin embargo, han llegado las vacas flacas. Al pasar la pandemia ha descendido la demanda de algunos productos y servicios de las tecnológicas. Además, la economía se está enfriando por la subida de los tipos de interés. De las grandes tecnológicas, la única que ha esquivado los despidos masivos ha sido Apple. Alphabet, Meta, Amazon y Microsoft han sacado la tijera.
En el conjunto del sector tecnológico, los despidos anunciados rondan los 300.000 entre 2022 y lo que va de 2023, según la web Layoffs.fyi, que va haciendo el cómputo de los recortes anunciados. Esos ajustes en el sector contrastan con una economía cerca del pleno empleo, con la tasa de paro por debajo del 4% y que ha tocado a comienzos de este año su mínimo en más de medio siglo.
Incertidumbre económica
Esa coyuntura económica es en parte lo que alega Amazon en su nueva ronda de recortes. “Dada la incertidumbre de la economía en la que vivimos y la incertidumbre que existe en el futuro próximo, hemos optado por racionalizar nuestros costes y nuestro personal”, afirma Jassy en su comunicado. “El principio fundamental de nuestra planificación anual de este año ha sido ser más ágiles y, al mismo tiempo, hacerlo de una manera que nos permita seguir invirtiendo con firmeza en las experiencias clave a largo plazo de los clientes que creemos que pueden mejorar significativamente sus vidas y las de Amazon en su conjunto”, añade.
El consejero delegado de Amazon explica que los negocios de la empresa han reordenado sus prioridades, lo que a veces ha supuesto reducir funciones, a veces a trasladar personas de una iniciativa a otra y a veces a crear nuevas plazas en las que los miembros del equipo actual no tenían las aptitudes adecuadas.
“Esto nos llevó inicialmente a eliminar 18.000 puestos (que compartimos en enero); y, al completar la segunda fase de nuestra planificación este mes, nos llevó a estas reducciones adicionales de 9.000 funciones (aunque verán contrataciones limitadas en algunas de nuestras empresas en áreas estratégicas donde hemos priorizado la asignación de más recursos)”, concluye Jassy.
El jefe de Amazon, que sustituyó al fundador, Jeff Bezos, en 2021, justifica que no se anunciasen a la vez todos los despidos en que no todos los equipos habían terminado sus análisis a tiempo. De hecho, reconoce que todavía no está claro quiénes van a ser despedidos, lo que abre unas semanas de nerviosismo e incertidumbre en la compañía. “Los equipos afectados aún no han terminado de tomar decisiones definitivas sobre las funciones que se verán afectadas. Una vez que se hayan tomado esas decisiones (nuestro objetivo es completarlas a mediados o finales de abril), nos comunicaremos con los empleados afectados (o, en su caso en Europa, con los órganos de representación de los empleados)”, dice Jassy.
FUENTE: EL PAÍS