Apenas pasen unas semanas de 2024, muchos de nosotros estaremos aún en la fase de luna de miel con nuestros propósitos de Año Nuevo, decididos a transformar nuestras vidas para bien. Ya sea un enero sin alcohol o un nuevo plan de ejercicios, es de esperar que la motivación para llevar una vida más feliz y saludable siga siendo alta. Y aunque tu principal objetivo sea la superación personal, el comienzo de un nuevo año presenta la oportunidad perfecta para evaluar la principal relación de tu vida: la que mantienes con esas muchas pantallas brillantes.

Puede que mires compulsivamente el teléfono a lo largo del día o que se sienta abrumado por los correos electrónicos de trabajo que te llegan cada mañana. Si es así, introducir límites online es una forma de cuidar la salud mental. Ya se trate de una desintoxicación digital, es decir, no consultar las redes sociales durante el horario laboral o incluso durante todo el mes, o de una limpieza primaveral de la bandeja de entrada para alcanzar ese glorioso hito del “0”, vale la pena plantearse un reseteo tecnológico para 2023.

Hemos preguntado a Adam Atler, autor de Irresistible: The Rise of Addictive Technology and the Business of Keeping Us Hooked, sobre cómo y por qué deberíamos trabajar nuestra relación con la tecnología en esta época del año, con el objetivo de hacer de nuestros propósitos de Año Nuevo una ventana para cambiar hábitos.

“Las experiencias que vivimos en nuestros teléfonos son muy atractivas: captan nuestra atención y nos impiden relacionarnos con el resto del mundo”, explica Atler a GQ. Por eso es menos probable que observemos el mundo que nos rodea, mantengamos una conversación significativa o nos concentremos en el trabajo mientras miramos el celular.

 

¿Pasas tu tiempo frente a las pantallas?

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“Necesitamos límites porque los teléfonos nos impiden vivir muchas experiencias importantes. Si permitimos que nos invadan, pondrán en peligro nuestro bienestar social, económico y psicológico”, añade.

Aunque podemos hacer cambios de hábitos cualquier momento, el Año Nuevo, marca el fin de una era y un nuevo comienzo para muchos, es un momento óptimo para reconsiderar nuestra relación con Internet. En una investigación realizada con otro académico de la UCLA, Atler descubrió que es más probable que la gente corra su primer maratón cuando está a punto de cumplir 30, 40 o 50 años: “Se puede correr maratones a cualquier edad, por supuesto, pero algo tiene una nueva década, como un nuevo año, que impulsa a la gente a auditar sus hábitos y decisiones vitales con más cuidado”, explica.

Dejar espacio a la tecnología

El consejo número uno de Atler es separarse de la tecnología: “La mayoría de nosotros tiene el teléfono a la mano las 24 horas del día. Está en nuestra mesa de noche, en nuestro bolsillo y en el auto con nosotros, así que es natural que lo tomémos en momentos de aburrimiento o ansiedad”.

Si pones el teléfono en otra habitación o lo dejas en casa durante un paseo, no tendrás más remedio que no usarlo: “En lugar de dejarlo en el escritorio o en el bolsillo, elige unas horas del día en las que lo pondrás en un cajón de otra habitación”, dice Atler.

También aconseja mantener los teléfonos fuera del dormitorio: “Si necesitas una alarma, compra un despertador pequeño y barato, o utiliza un reloj. El espacio es tu amigo cuando se trata de resistir la tentación”.

Apagar las notificaciones

Un informe de Ofcom de 2018 descubrió que las personas revisan sus teléfonos cada 12 minutos. Eso resulta 60 chequeos de teléfono en un día de 12 horas. Sí, eso es mucho tiempo que estás perdiendo, pero el tiempo de recuperación de romper nuestra concentración hace que esas distracciones sean aún más perjudiciales. Algo que podría ayudar a reducir el atractivo de tu teléfono es desactivar las notificaciones push en plataformas de redes sociales como Instagram, Twitter y TikTok.

 

Tu productividad no es la única que se ve afectada con el uso excesivo del teléfono.

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Puedes seguir manteniendo activadas las alertas de mensajes de texto, llamadas y WhatsApp, pero evitar que tu teléfono esté constantemente inundado de actualizaciones lo hará menos atractivo. La ciencia ha demostrado que existe una relación entre el número y la frecuencia de las notificaciones push y el riesgo de desarrollar adicción al smartphone. Puede que al principio te resulte extraño desactivar las notificaciones, pero puede que cuando navegues por las aplicaciones lo hagas con más intención.

Hacer una limpieza digital

Puede que sientas que ya tienes unos buenos límites en lo que respecta a las redes sociales o las notificaciones push. Aun así, a todo el mundo le vendría bien una limpieza digital, y el Año Nuevo es el momento perfecto para hacerla.

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Desde configurar un gestor de contraseñas hasta darse de baja de todos los boletines y marcas de ropa cuestionables que te bombardean varias veces al día y eliminar las descargas innecesarias de tu computadora, podría valer la pena dedicar una o dos horas a barrer tus perfiles en línea. ¿Es tu escritorio un cementerio de capturas de pantalla y memes irrelevantes? Este es el momento de limpiar toda esa basura. Además de liberar espacio, esto puede ayudarte a sentirte más productivo y atento. Algo a lo que todos podemos aspirar con nuestros propósitos de Año Nuevo.