Inmigrantes ingresaban a la Unión Europea a través de la frontera occidental de Serbia conCroacia el miércoles, abriendo un nuevo frente en la crisis de migración del continente luego de que Hungría cerró laprincipal ruta por tierra.
Croacia dijo que estaba enviando con urgencia expertos en desminado a la zona fronteriza para identificar campos minados de las guerras de los Balcanes en la década de 1990, la última vez que cientos de miles de personas desplazadas caminaron por Europa.
La decisión de Hungría de cerrar la frontera externa de la UE con Serbia esta semana fue el intento más contundente a la fecha de un país europeo de poner freno al flujo de refugiados e inmigrantes que está desbordando al bloque.
La ruta por Hungría ha sido la principal usada por los migrantes que llegan primero a Grecia y que después caminan por la península Balcánica para alcanzar la zona de libre tránsito de Schengen y finalmente llegar a Alemania.
Con esa ruta cerrada, miles de personas siguen en los Balcanes buscando otras vías hacia el norte y el oeste, posiblemente por Croacia y Rumania, países que son miembros de la UE pero no forman parte de Schengen.
Periodistas de Reuters vieron cientos de inmigrantes, algunos de los cuales se identificaban como iraquíes, caminar por los campos cerca de la frontera oficial de Sid, cruzando entre Serbia y Croacia, que es miembro de la UE desde 2013.
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Llegaron en autobús desde el pueblo serbio de Presevo, en el sur del país, tras cambiar de ruta tarde el martes hacia suelo croata luego de que Hungría selló su frontera.
Medios serbios dijeron que al menos 10 autobuses con migrantes habían salido de Presevo en la noche hacia Sid.
Hungría está levantando un valla de 3.5 metros de alto a lo largo de su frontera con Serbia. El Gobierno húngaro planea además extender la cerca al límite con Rumania.
APLICANDO LAS REGLAS
El mayor flujo de migrantes que entra en Europea occidental desde la Segunda Guerra Mundial ha sembrado discordia en el continente, avivando a partidos políticos de extrema derecha y poniendo en riesgo los avances de Schengen.
Hungría afirma que sólo está aplicando las normas de la UE con el cierre de su frontera y afirma que Serbia es un país seguro.
Sin embargo, Naciones Unidas considera que Serbia carece de la capacidad para recibir a los refugiados detenidos en las puertas de Europa.
Alemania ordenó el domingo que se reintrodujeran controles fronterizos de emergencia para desviar el flujo de personas que querían llegar a Múnich.
Por su parte, Austria y Eslovaquia dijeron que la decisión de Berlín no les dejaba más opción que imponer controles similares.
Croacia dijo que permitiría a los migrantes que lleguen a Serbia seguir su camino. El país tiene una frontera con Eslovenia que les podría dar a los desplazados una nueva ruta para entrar en la zona de Schengen.
MANO DURA HÚNGARA
La Policía húngara informó hoy de que ha tomado «diferentes medidas» contra 519 refugiados por haber cruzado ilegalmente la frontera desde la medianoche del lunes al martes, cuando cerró su línea divisoria con Serbia y comenzó a aplicar la ley que penaliza con cárcel la entrada irregular en el país.
Se han abierto procedimientos penales en 91 casos por cruce ilegal de la frontera, castigado con un máximo de cinco años de prisión, informó en rueda de prensa György Bakondi, asesor de Seguridad Nacional del Gobierno.
Algunos de los juicios comenzarán hoy mismo, anunció Bakondi.
Se espera que los acusados sean condenados a prisión condicional y expulsados del país.
El asesor no especificó cuántos de esos 519 refugiados serán procesados por el simple cruce ilegal de la frontera y a cuántos se aplicará el agravante de haber dañado la valla en el proceso.
Después del cierre de la frontera ha descendido drásticamente el número de refugiados que entraron en Hungría, desde los más de 9 mil del lunes hasta los 366 de ayer.
Esperamos que la inmigración disminuya o encuentre otras vías», dijo Bakondi.
En las últimas 16 horas 94 refugiados han presentado ante las autoridades húngaras solicitudes de asilo, entre ellos sirios, afganos, somalís y 13 menores.
Hasta el momento ninguno ha recibido ese estatus, mientras que en 18 casos se han rechazado las peticiones y los solicitantes serán expulsados a Serbia.
El cierre físico y legal de la ruta que llevaba a los refugiados desde Turquía por Macedonia, Serbia y Hungría hacia los países ricos del norte, especialmente Alemania, ha provocado que quienes huyen de la guerra y la pobreza se dirijan ahora desde suelo serbio a Croacia y Eslovenia, para entrar en Austria desde el sur.
Mientras, la emisora serbia RTS indica que en el lado serbio de la frontera con Hungría, unos 3 mil refugiados esperan en un limbo entre los dos países, ya que ninguno quiere aceptarlos.
( Fuente Excelsior)