La organización Armed Conflict Location & Event Data Project (ACLED) identificó que, durante el mes de noviembre, la violencia en México se agravó especialmente en tres estados: Sinaloa, Michoacán y Tamaulipas.
A través de un análisis regional —actualizado mensualmente en su sitio web oficial— ACLED ubicó a estas entidades como zonas en las que las disputas entre grupos criminales ocasionaron un incremento en los índices delictivos.
Respecto a Sinaloa, en noviembre se cumplieron dos meses desde que escalaron las hostilidades entre las facciones de Los Chapitos y Los Mayos, emanadas del Cártel de Sinaloa. Reportes de la Fiscalía General del Estado (FGE) e investigaciones periodísticas señalan que se registraron 176 homicidios sólo en el mes de noviembre. ACLED precisó que los municipios más afectados fueron Culiacán, Navolato y Mazatlán.
Un ejemplo de la exacerbada violencia en el estado fue visible entre los días 25 y 30 de noviembre, período en el que las autoridades confirmaron un total de 50 víctimas.
En Michoacán, los sostenidos intentos del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) por adueñarse de Tierra Caliente fueron identificados entre las principales causas de la inseguridad. El 8 de noviembre, elementos del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional desplegaron un operativo luego de que se reportaran enfrentamientos armados en municipios como Apatzingán y Buenavista.

Acorde con el análisis de ACLED, Los Caballeros Templarios han podido frenar la expansión del CJNG, pese a la reciente alianza de este grupo criminal con la célula de Los Viagras, que anteriormente estaba vinculada con los Templarios. En la región, los cárteles mantienen una pugna por el control de actividades ilícitas como la extorsión a productores agrícolas, la cual puede generarles ganancias millonarias.
Finalmente, en lo que concierne a Tamaulipas, el 22 de noviembre se registró un suceso que ilustra el panorama que han dejado a su paso las organizaciones criminales: seis cuerpos con huellas de tortura fueron apilados sobre la carretera federal San Fernando – Reynosa. Las víctimas estaban maniatadas y presentaban heridas de bala.
Las investigaciones apuntan que el hecho podría ser atribuido a la facción de Los Escorpiones, del Cártel del Golfo, mientras que las víctimas serían supuestos integrantes de Los Zetas Vieja Escuela.
“Aunque el gobernador del estado [Américo Villarreal] anunció un reforzamiento de las operaciones de seguridad en coordinación con fuerzas federales, los grupos del crimen organizado desafiaron a las corporaciones a lo largo de noviembre con el uso de drones equipados con explosivos para atacar elementos de seguridad en comunidades como Doroteo Arango [en Reynosa] y General Francisco González Villarreal [en San Fernando]”, establece ACLED en el informe.
Debido a las dinámicas del crimen organizado en México, la organización anticipa que el año 2025 podría traer consigo un aumento en la violencia, debido especialmente a la búsqueda del CJNG por ampliar sus áreas de operación ante la fragmentación del Cártel de Sinaloa.
FUENTE:INFOBAE