- La Producción Orgánica: Una Utopía para el Campesinado
Redacción Macronews por Santiago Ramírez.- La producción orgánica de alimentos, un modelo cada vez más promovido a nivel mundial por sus beneficios medioambientales y para la salud, enfrenta serias dificultades para convertirse en una realidad en las comunidades rurales.
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A pesar de las buenas intenciones, la transición hacia métodos orgánicos no es sencilla. En la práctica, este modelo de producción requiere insumos difíciles de obtener y manejar, lo que convierte la eliminación de los productos químicos en una utopía para muchos agricultores.
Marcelo Poot, campesino del ejido Tabasquito, expresó su preocupación sobre la viabilidad de la agricultura orgánica en su comunidad.
«No es práctico aterrizar la producción orgánica porque se necesita un volumen descomunal de insumos», comentó Poot, quien lleva años trabajando la tierra con métodos convencionales.
Según él, el uso de insumos químicos sigue siendo esencial para la mayoría de los campesinos, especialmente para aquellos que trabajan en grandes extensiones de tierra.
Un ejemplo claro es el maíz: «Una hectárea tiene mínimo diez mil cepas de maíz, y con la agricultura sostenible, cada cepa necesita un kilo de fertilizante orgánico, lo que implica que se requieren diez toneladas para una hectárea», explicó.
Además de la cantidad de insumos, Poot señaló que producir fertilizantes orgánicos requiere materiales que no siempre están al alcance en las comunidades rurales.
Ingredientes como melaza, salvado y pollinaza son fundamentales para elaborar este tipo de fertilizantes, pero no todos los campesinos tienen acceso a ellos.
«Todo esto requiere demasiada atención y trabajo, lo que complica aún más su implementación», agregó.
No obstante, Poot reconoció que en áreas pequeñas y con fines de consumo familiar, la producción orgánica es más factible y recomendable.
«Para la producción a baja escala, como la de una familia que cultiva en su terreno, sí es viable y mucho más accesible. Es una opción saludable y, sobre todo, más económica para las familias», indicó.
Aunque la producción orgánica puede ser un desafío para quienes trabajan grandes extensiones de tierra, en pequeños espacios sigue siendo una alternativa viable.
Sin embargo, para que esta modalidad de cultivo se haga más común, es necesario que las políticas públicas y las iniciativas de apoyo al campesinado sean más accesibles, proporcionando los recursos y la capacitación necesarios para dar el salto a la sostenibilidad sin que esto implique un riesgo para la seguridad alimentaria.