Redacción Macronews.– La presidenta Claudia Sheinbaum descartó este miércoles que la decisión de la Cámara de Diputados de desechar la solicitud de desafuero contra Cuauhtémoc Blanco haya provocado una fractura dentro de Morena y sus aliados.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum enfatizó que el caso es un asunto legislativo y judicial, por lo que el Ejecutivo no interviene en la decisión.
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«A veces creen que la presidenta está metida en todo, y nosotros sí creemos en la separación de poderes», declaró.
Al ser cuestionada sobre si la votación podría generar conflictos en la llamada “Cuarta Transformación”, Sheinbaum lo negó y pidió analizar el contexto del caso.
«No, ninguna. Es todo caso que se revise con otras personas que están en esta situación», respondió.
Investigación bajo cuestionamientos
La mandataria señaló que desconoce la carpeta de investigación contra Cuauhtémoc Blanco, pero mostró escepticismo debido a que la denuncia fue impulsada por el exfiscal de Morelos, Uriel Carmona, quien actualmente enfrenta acusaciones por encubrimiento en el feminicidio de Ariadna López.
«Siempre vamos a apoyar a las mujeres, pero tiene que haber pruebas suficientes en un caso como este. Ahora, ¿quién pone esta denuncia?», cuestionó.
La votación en la Cámara de Diputados cerró con 291 votos a favor de desechar el desafuero, 158 en contra y dos abstenciones, lo que generó división dentro de Morena. Mientras algunos legisladores respaldaron la decisión, un sector del partido exigió que Blanco solicitara licencia para no obligarlos a una disyuntiva ideológica.
En una intervención fuera del debate, el exgobernador de Morelos aseguró desde la tribuna que se presentará ante la Fiscalía, aunque no renunció al fuero. El asunto regresará a la Fiscalía de Morelos, donde continuará su proceso legal.
