- Solo una res sacrificada legalmente en un año: rastro municipal de José María Morelos opera al 0.2% de su capacidad por falta de regularización pecuaria
Redacción Macronews.- A pesar de contar con la infraestructura necesaria para operar de manera regular, el rastro municipal de José María Morelos ha registrado una actividad mínima en el último año, con apenas una res ingresada legalmente. Esta baja operación, equivalente a menos del 0.2% de su capacidad instalada, se debe al rezago en la regularización de los Centros de Producción Pecuaria (UPP), condición indispensable para movilizar y sacrificar ganado conforme a la legislación vigente.
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De acuerdo con las autoridades locales, esta situación ha derivado en prácticas de sacrificio clandestino, evidenciadas por la venta constante de carne de res en carnicerías de la cabecera municipal cada fin de semana. La falta de trazabilidad y control sanitario en estos productos representa un riesgo directo para la seguridad alimentaria de la población.
Miguel Tuyub, director del rastro municipal, informó que se ha iniciado una estrategia de supervisión en los puntos de venta, autorizada por el estado, que permitirá al médico veterinario del rastro visitar las carnicerías para verificar las condiciones sanitarias de la carne bovina. “Estamos buscando que el producto salga directamente del rastro, con garantía de calidad y legalidad”, señaló.
El funcionario aclaró que el problema no radica en los comerciantes ni en los consumidores, sino en la falta de actualización de las UPP por parte de los ganaderos. Mientras no se regularicen, los animales no pueden ser movilizados ni sacrificados en instalaciones oficiales, perpetuando la informalidad y limitando la recaudación municipal.
La ausencia de ingresos legales afecta no solo la economía local, sino también la capacidad del municipio para garantizar la higiene y calidad de los productos cárnicos. De lograrse la regularización, el rastro podría convertirse en un eje de control sanitario y trazabilidad, asegurando que cada corte de carne provenga de un proceso certificado y seguro para el consumo humano.