CHINA EXHIBE SU PODER ROBÓTICO EN SHANGHÁI CON MÁS DE 150 ANDROIDES HUMANOIDES: EL PAÍS ASIÁTICO ACELERA SU APUESTA POR LIDERAR LA REVOLUCIÓN DE LA ROBÓTICA CON APLICACIONES REALES

La WAIC 2025 mostró un salto tecnológico tangible: robots que ya actúan, conversan, piensan y se adaptan a su entorno en tiempo real.
Redacción Macronews
Shanghái, China, 31 de julio del 2025.- Con más de 150 robots humanoides en escena y al menos 60 debutando a nivel mundial, la Exposición Mundial de Inteligencia Artificial (WAIC 2025) en Shanghái dejó en claro que China no quiere imaginar el futuro de la robótica: quiere construirlo y liderarlo.
Durante cuatro días, el evento reunió a más de 80 compañías especializadas que presentaron avances que ya superan la fase experimental. Desde asistentes personales hasta androides industriales capaces de interpretar órdenes complejas y adaptarse en tiempo real, la robótica humanoide parece haber dado un salto decisivo.
Uno de los desarrollos más destacados fue el nuevo brazo robótico de Dobot, alimentado por el modelo VLA de Tencent, capaz de integrar lenguaje, visión y acción en una misma plataforma. Este robot no solo ejecuta tareas con alta precisión, sino que entiende su entorno y responde coherentemente a los humanos.
Por su parte, Unitree apostó por la expresividad física con robots que escriben caligrafía china o practican boxeo. Deep Robotics presentó cuadrúpedos ya desplegados en más de 600 entornos reales. Keenon mostró su robot bípedo XMAN enfocado al sector servicios, mientras que Cyborg Robotics dio a conocer el primer humanoide de carga pesada para tareas industriales exigentes.

Según Jiang Lei, experto en IA corporizada, la robótica china ha dejado atrás la fase teórica: “Los nuevos robots perciben, comprenden, ajustan y ejecutan tareas complejas con una precisión que ya roza el milímetro”, explicó.
Aunque Estados Unidos mantiene ventaja en biomecánica y locomoción autónoma, China está tomando la delantera en velocidad de producción, acceso a datos y escalabilidad industrial. “No es solo un tema de tecnología, es un tema de sistema”, destacan analistas.
Además, China no esconde su ambición exportadora: su oferta tecnológica ya se abre paso en mercados emergentes del sudeste asiático, donde la demanda de automatización para sectores como semiconductores, electrónica y logística no deja de crecer.

Así, mientras en el imaginario colectivo aún se asocia a los robots humanoides con películas como Her o El Hombre Bicentenario, en Shanghái ya desfilan versiones reales que conversan, colaboran y aprenden en tiempo real.











