La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México informó que el chofer de la pipa que explotó en Iztapalapa circulaba a exceso de velocidad.
El accidente ocurrió mientras la pipa transportaba gas LP para abastecer tanques estacionarios en la zona.
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Este exceso de velocidad habría sido un factor determinante en la pérdida de control de la unidad, que derivó en la explosión y afectaciones a viviendas cercanas.
Consecuencias del accidente
La explosión dejó 17 personas fallecidas y varios heridos que fueron trasladados a hospitales de la Ciudad de México.
Además, se registraron daños en varias viviendas, algunas con riesgo estructural, y se brindó apoyo a las familias afectadas.
Las autoridades han realizado peritajes y revisiones técnicas para determinar con precisión las causas y responsabilidades del incidente.
Medidas preventivas
La Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRPC) reforzó los protocolos de seguridad para el transporte de gas LP en la capital.
Se busca evitar que accidentes similares se repitan y garantizar la seguridad de la población en zonas residenciales cercanas a rutas de transporte de gas.
Responsabilidad y seguimiento
La Fiscalía continúa con las investigaciones y analiza la posible responsabilidad penal del operador de la pipa, así como de la empresa transportista, para determinar sanciones y medidas preventivas a futuro.