Redacción Macronews.- Tomar una taza de café en las mañanas no es solo un ritual: recientes estudios revelan que quienes consumen café en ayunas tienen hasta un 31 % menos riesgo de muerte por enfermedades cardiovasculares y un 16 % menor riesgo de muerte por cualquier causa en comparación con quienes no lo hacen. En este artículo veremos los beneficios del café en las mañanas, qué mecanismos explican su efecto y cómo incorporar esta práctica de forma saludable.
¿Cuáles son los beneficios del café en las mañanas?
El punto clave es “tomar café en las mañanas”, te compartimos los principales beneficios respaldados por la ciencia:
Mejora del estado de alerta y energía: la cafeína bloquea los receptores de adenosina y aumenta neurotransmisores como la dopamina.
Reducción del riesgo de diabetes tipo 2: por cada taza de café consumida al día, se estimó una reducción del ~6 % en el riesgo.
Protección cardiovascular al beber café por la mañana: limitar el café hasta el mediodía se asoció con menor riesgo de muerte total y por cardiopatías.
Mejor salud del hígado y menor riesgo de algunos tipos de cáncer: estudios meta-analíticos muestran reducción de hasta ~19 % en mortalidad por cardiopatías y ~30 % en accidente cerebrovascular para consumidores moderados.
¿Por qué tomar café en las mañanas es mejor que a lo largo del día?
El momento de tomar el café tiene un rol clave. Si bien el “tomar café” en general ya tiene beneficios, hacerlo por la mañana potencia la ventaja. Entre los factores están:
El café ingerido en la mañana se alinea mejor con el ritmo circadiano del cuerpo, evitando interferencias con el sueño que pueden aumentar el riesgo cardiovascular.
En un estudio con 40 725 personas, quienes bebían café antes del mediodía tenían 16 % menos riesgo de muerte por cualquier causa y 31 % menos riesgo de muerte cardiovascular, en comparación con quienes no tomaban café. Ningún beneficio similar se observó en quienes lo bebían todo el día.
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¿Cómo sacar provecho y qué precauciones tener al tomar café en las mañanas?
Para que el hábito de tomar café en las mañanas sea realmente benéfico, conviene observar ciertos detalles:
Buenas prácticas al tomar café:
Preferir entre 1 a 3 tazas al día, ya que los mayores beneficios se vieron en ese rango. Tomarlo antes del mediodía, idealmente.
Mantener bajo el contenido de azúcar y crema; los aditivos excesivos pueden reducir los beneficios.
Elegir métodos de filtrado que reduzcan compuestos que podrían elevar el colesterol si se usan sin filtro.
Precauciones clave:
Personas embarazadas, con insomnio, arritmias o hipertensión deben moderar el consumo de cafeína.
No utilizar el café como sustituto de sueño o como único mecanismo para “despertar saludablemente”. El descanso sigue siendo fundamental.
Evitar beber mucho café por la tarde o noche, ya que puede limitar los beneficios o incluso revertirlos.
Tomar café en las mañanas puede convertirse en un aliado poderoso para tu salud: desde mejorar energía hasta aportar a la longevidad. Sin embargo, no basta con “solo tomar café”: el horario, la cantidad y el estilo de preparación marcan una diferencia. En la era del bienestar consciente, aprender a incorporar este hábito puede ser un pequeño paso con gran impacto.
