El indomable territorio australiano fue el marco de una épica pelea entre dos letales criaturas que acabó con un resultado insólito.
En lugar de que una serpiente saliera victoriosa del enfrentamiento con un sapo, fue la presa la que acabó devorando al depredador.
Hambriento por la pelea, el sapo comenzó a devorar viva a la serpiente, cuyo cuerpo era al menos tres veces más largo que el de su verdugo.
Para los últimos segundos del video grabado con un teléfono móvil, se puede ver cómo el sapo tiene problemas para engullir la cabeza de la serpiente.
La lucha del mundo salvaje continúa fascinándonos con este tipo de sucesos.
(FUENTE: EXCELSIOR)