Fue el 1 de diciembre, Día Mundial de la Lucha Contra el Sida, fecha en la que en el estado se realizaron dos acciones; la primera, aplicación de pruebas rápidas, que en el caso de Cancún, se llevó a cabo en la zona conocida como “El Crucero”, donde la Jurisdicción Sanitaria contaba con 500 reactivos, de los que sólo se aplicaron poco más de 300, y resultó positivo al VIH una persona del sexo masculino.
Asimismo, las diferentes organizaciones de la sociedad civil como ICW, Red Positiva, Uncondis, Círculo Social Igualitario, Aprendiendo a Vivir con VIH/Sida, SEEDSSA y Asociación Nacional de Existencia Digna, realizaron una marcha para concientizar a la población de la severidad del problema y a las autoridades sanitarias para que tomen cartas en el asunto.
El problema es tal, que de acuerdo con el Registro Nacional de Casos de Sida, en su versión actualizada del 13 de noviembre, elaborada por la Dirección General de Epidemiología de la Secretaría de Salud federal, en el país 124 mil 718 personas viven con VIH/Sida y hay un registro histórico de 178 mil 591 casos.
En Quintana Roo, de acuerdo al registro, éste ocupa el segundo lugar con mayor número de casos nuevos de VIH, 10.1 por cada 100 mil habitantes, así que saque usted la cuenta; si en el estado radican de manera permanente poco más de un millón 300 mil personas, la cifra es alarmante; sin embargo, los casos de Sida reportados al cierre del 2014 fueron 2 mil 742, lo que pone a Quintana Roo en segundo lugar a nivel nacional.
De acuerdo con el director de Red Positiva, Roberto Guzmán, esta disparidad entre la detección de casos de VIH y los de Sida, pueden ser indicadores de dos cosas, que en el estado la aplicación de pruebas rápidas es mayor que en otras entidades y de que el seguimiento del paciente detectado como positivo se queda en el “limbo”, sin tratamiento, por lo que existen enfermos que pasan a manifestar la enfermedad sin el control adecuado.
Hombres, en peligro
Un dato que llama la atención es que el 24% de los nuevos casos de VIH se está dando en hombres mayores de 50 años. Asimismo, el mayor número de personas con este padecimiento desconoce que lo tiene hasta que se manifiesta como Sida, por lo que es éste el momento de mayor riesgo y los daños son difíciles de revertir cuando acuden a recibir atención médica.
¿Qué hace falta?
Según organizaciones, como Red Positiva, para dar batalla contra la plaga del siglo se requiere: Promover y fortalecer la participación activa de las personas infectadas con VIH en la aportación de ideas y acciones que fortalezcan las políticas públicas enfocadas a la atención y acceso a servicios integrales.
Generar la construcción de una agenda de incidencia política y un plan de acción, pero planificada en conjunto para dar respuesta a la epidemia, donde se involucren instituciones y actores sociales, ya que en la actualidad cada organización que trabaja en el tema lo hace por separado, hasta con un dejo de rivalidad. Inclusive, el consejo estatal encargado del tema de la Secretaría de Salud, no ha sesionado en más de tres años, por lo que nadie coordina las acciones.
Como que al secretario estatal de Salud, Juan Ortegón Pacheco, se le ha olvidado el tema.
Se requiere también capacitación permanente para sensibilizar a los trabajadores del Sector Salud sobre los temas de discriminación y homofobia, para dar un trato digno de calidez y atención a las personas que viven con VIH y se atienden en los diferentes CAPASITS. Los enfermos de este mal, en algunas ocasiones sufren malos tratos e incluso son expuestos a críticas al no ser atendidos de manera privada.
Otro de los paradigmas a romper es el de reforzar la educación sexual que se imparte en el sector educativo en todos los niveles, desde preescolar hasta universidad, que esta sea laica, objetiva y libre de prejuicios.
Son necesarias campañas dirigidas a grupos focales, como son hombres que tienen sexo con otros hombres (homosexuales, bisexuales y heterosexuales, que tienen esporádicamente alguna relación con un homosexual) sobre el uso constante del condón.
También las campañas van dirigidas a las mujeres embarazadas para que se realicen la prueba de detección de antígeno VIH, para saber si están infectadas o no y de esa manera prevenir la transmisión vertical. Campaña permanente, invitando a la población sexualmente activa a realizarse la prueba rápida o de Elisa, para saber si vive con VIH o no. Y en caso de vivir con VIH, evitar la transmisión a otras personas o reinyectarse droga o medicamentos y entrar a un protocolo de medicación antirretroviral para inhibir el virus del VIH.
Insumos suficientes de prevención: condones para hombres y mujeres; Lubricantes en los centros de salud y hospitales de primer y segundo nivel y Pruebas rápidas de detección de VIH para las asociaciones civiles.
Dotación y entrega de leche para los niños nacidos de madres infectadas por el VIH para evitar la transmisión vertical, toda vez que la Secretaría de Salud en este momento no cuenta con este insumo.
Solidaridad, a la cabeza en prevención
En Playa del Carmen se estableció el Consejo Municipal de Prevención y Respuesta al VIH/Sida, con lo que el gobierno municipal podrá coadyuvar a promover las acciones y políticas públicas tendientes a la prevención, detección, atención, disminución de riesgos, impacto social y respeto a los derechos humanos de las personas con esa enfermedad. Este órgano es el primero que se establece en un municipio del estado.
A propuesta de la regidora Laura Beristáin Navarrete, el Comusida efectuará acciones en torno a la información y sensibilización de la población, el aumento y facilitación del acceso de la población a pruebas rápidas del VIH para la detección oportuna del virus y la coordinación de acciones entre las autoridades estatales y federales del sector salud, tendientes a la instalación de un CLISIDA y un CAPASIT, que permitan tener una mejor atención a las personas infectadas con VIH o que padezcan Sida.
Playa del Carmen, con los rangos más altos de prevalencia
La prevalencia del Sida en Playa del Carmen es del 86%, de las más altas del país y del estado, por lo que se establecieron metas concretas para frenar la propagación del virus y cumplir la meta 90-90-90, de la que México es partícipe en materia de salud, se debe informar y sensibilizar a la población para que cambie su comportamiento sexual de riesgo y eliminar la discriminación contra personas, aumentar y facilitar el acceso de la población a pruebas rápidas para su detección oportuna, además de mejorar el tratamiento por parte de las instituciones del Sector Salud.
Iniciativa pendiente
Desde inicios de año, el diputado local, Mario Machuca, propuso al Congreso la creación de la Ley para la Prevención y Control del Virus de Inmunodeficiencia Humana, Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida y otras Infecciones de Transmisión Sexual del Estado de Quintana Roo. Sin embargo, a la fecha no se sabe nada sobre esta propuesta, muestra clara de que el tema es de escaso interés en la Cámara de Diputados. Tantán.










