La Conafor llevó a cabo el trazado de la línea negra para evitar que un incendio avance.
Combatientes de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) llevaron a cabo el trazado de la línea negra, la cual consiste en la quema de material combustible sobre una franja o guardarraya, a fin de delimitar un área para evitar que el fuego cruce de una región a otra en caso de un incendio.
Rafael León Negrete, gerente de la Conafor, detalló que hasta el momento Quintana Roo se mantiene como la entidad con menos afectaciones a nivel nacional con tan sólo tres conatos y un incendio, que en conjunto representan una afectación inferior a cuatro hectáreas, registrados en la actual temporada.
“Llevamos a cabo lo que nosotros conocemos como la línea negra, que es una zona en donde los combatientes realizan una quema controlada para incinerar todo el material seco que está cerca de la brecha por donde alguien pudiera pasar y tirar un cerillo, entonces lo que se hace es que toda esa basura se junta y se le prende fuego de manera supervisada, lo que permite que en zonas de interés no se queme en caso de un incendio forestal” expresó.
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El funcionario federal detalló que esta actividad se llevó a cabo como medida de entrenamiento para los combatientes integrantes del Equipo Estatal de Manejo de Incidentes (EEMI) para que adopten el protocolo a seguir en caso de un incendio.
Línea negra
Agregó que el objetivo de aplicar la línea negra es evitar que el fuego avance, ya que al encontrar una franja limpia el fuego se detiene e inicia la supresión.
Aseguró que en caso de no registrarse incendios en los próximos días en Quintana Roo, este entrenamiento o ejercicio estaría realizándose también en la zona norte, pero en caso de algún siniestro, sería aplicado en campo ya que esta es una de las herramientas que se utilizan para frenar el avance del fuego.
Finalmente, León Negrete dijo que en comparación a la temporada del 2015 este año la reducción de incendios ha sido importante, ya que al mismo corte del año pasado se tenían alrededor de 22 incendios con más de 200 hectáreas siniestradas.
Fuente: Sipse