La policía de Francia identificó al hombre que mató a al menos 84 personas en Niza el jueves como un franco-tunecino de 31 años residente de la misma ciudad.
Algunos medios señalan que tenía la doble nacionalidad, y otros que poseía solo la tunecina. Pero las autoridades no lo han aclarado aún.
Al hombre se le conocía por delitos menores, relacionados con drogas y alcohol, pero no estaba en las listas de jóvenes musulmanes radicalizados que podrían estar en contacto con grupos yihadistas, informaron fuentes policiales a los medios franceses.
Y los medios franceses lo nombran como Mohamed Lahouaiej Bouhlel, quien vivía en la ciudad y trabajaba de repartidor.
El individuo utilizó un camión para arrollar a una multitud que celebraba la fiesta nacional de Francia, dejando también decenas de heridos en la sureña ciudad.
Poco después el atacante moriría a manos de la policía.
Una cadena de la televisión francesa informó que la policía encontró el carnet de identidad del conductor en el camión y que los agentes están inspeccionando su casa de Niza.
Los cuerpos de seguridad también recogieron del vehículo su licencia de conducir y un teléfono celular.
Asimismo, encontraron armas de fuego y granadas dentro del camión.
Sin historial extremista
La familia de Bouhlel vive en Msakin, cerca de Sousse, una ciudad de Túnez, según le dijo una fuente de seguridad de ese país, quien habló en condición de anonimato, al servicio árabe de la BBC.
Sus padres están divorciados y viven en Francia, añadió.
La misma fuente informó que Mohamed Bouhlel viajaba a Túnez con frecuencia.
Según los registros de migración, la última vez que regresó del país del norte de África a Francia fue hace ocho meses.
De acuerdo a los medios locales, había estado casado y era padre de tres hijos.
Se había separado de su pareja en medio de acusaciones de violecia doméstica, según reportes locales.
Este viernes su exesposa fue puesta en custodia por los investigadores del caso, según la agencia de noticias AFP, que cita a la cadena francesa de televisión d’iTélé.
Y al igual que las autoridades francesas, a las tunecinas tampoco les consta que tuviera relación allí con grupos extremistas ni que hubiera participado en «actividades terroristas».
El gobierno tunecino condenó «el los términos más contundentes posibles» el ataque.
«Túnez está junto a Francia en su lucha contra el terrorismo y apoya cualquier medida tomada por el gobierno francés para proteger su territorio y la seguridad de sus ciudadanos y turistas», se lee en la declaración que hizo pública.
Investigación en curso
De la misma manera, el presidente francés François Hollande, calificó lo ocurrido de «ataque terrorista», aún no se conocen los motivos ni si el conductor actuó solo o era parte de un grupo extremista.
Ningún grupo se ha adjudicado por el momento la autoría del ataque.
La investigación está ahora en manos de la sección antiterrorista del Ministerio Público, informó en rueda de prensa el primer ministro francés Manuel Valls.
Las líneas de investigación son «asesinatos y tentativas de asesinato por un grupo organizado con un objetivo terrorista» y «asociación criminal de delincuentes terroristas».
Cómo fue el ataque
Momentos antes de la comparecencia de Hollande, el fiscal de Niza Jean-Michel Pretre explicó que el conductor del camión manejó a alta velocidad durante dos kilómetros entre la multitud que presenciaba los fuegos artificiales.
El ataque tuvo lugar en el Paseo de los Ingleses, el malecón de la ciudad, poco después de las 23.00 hora local (21.00 GMT) durante los actos de celebración del 14 de julio, fiesta nacional de Francia que conmemora la Toma de la Bastilla en 1789.
A pesar de que la fortaleza medieval conocida como la Bastilla sólo custodiaba a siete prisioneros, su caída aquél 14 de julio en manos de los revolucionarios parisinos supuso simbólicamente el fin del Antiguo Régimen y el punto inicial de la Revolución francesa.
Manuel Valls, el primer ministro de Francia, anunció duelo nacional para el 16, 17 y 18 de julio y dijo que las banderas ondearán a media hasta en todas las oficinas oficiales del país.
«Tenemos que mostrar solidaridad y calma colectiva», llamó Valls a sus conciudadanos.
«El ataque ha sido contra la unidad de Francia, pero Francia seguirá fiel al espíritu del 14 de julio», aseguró el político.
Fuente: BCC Mundo