No se comprende a totalidad nociones básicas de la ciencia.Marjaana Lindeman y Annika Svedholm-Hakkinen publicaron un estudio que causará revuelo, pues pone en entredicho las creencias de varias personas.
De acuerdo con su investigación, el creer en fenómenos metafísicos, como el tarot, fantasmas, adivinación e incluso en formas religiosas, afecta con la adecuada percepción de la realidad; referida a los eventos relacionados con las ciencias duras, dígase la física, biología y química. Pues los dogmas o estatutos de estas «ideologías» pueden hacer que la gente dé por válidas ciertas relaciones contextuales erróneas.
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Afirman que, a mayor creencia, menor la comprensión de las leyes básicas de las ciencias mencionadas; esto debido a que se le atribuyen concepciones morales, filosóficas y psicológicas a eventos del orden natural.
Señalan que este tipo de razonamiento está presente en los niños, así como en los seres humanos de la etapa primigenia de las comunidades clásicas (Grecia, Roma, Egipto, Tenochtitlan), donde se atribuía a los dioses todo lo que sucedía en el mundo, incluyendo fenómenos físicos como tormentas o erupciones volcánicas.
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En otras palabras, el razonamiento abstracto de lo creyentes más fervientes se queda en un estadio primario. Sin embargo, y de manera un tanto curiosa, ese mismo pensamiento hace a estas personas más felices y preocupadas por las demás personas; contrario a aquello que dudan de dichas formas metafísicas y paranormales.
Para llegar a este resultado se entrevistaron con 258 personas, quienes les hablaron de sus creencias, así como de su forma de relacionarse con el mundo.
Fuente: SDP noticias
