Tal como le comenté el día de ayer (uyyyy ya parezco adivina), el dirigente estatal del Partido Movimiento Regeneración Nacional, José Luis Pech Várguez, envió a la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia, solicitud para la expulsión de los diputados locales, Juan Ortiz Vallejo y Silvia Vázquez, por sumarse al bloque del PAN y PRD en la XV Legislatura del Congreso de Quintana Roo.
Le recuerdo que los congresistas de Morena, de manera “inesperada”, se unieron a la votación, sin poner peros, del bloque del PAN-PRD & friends, con lo que arrasaron en el Congreso, lo que dejó hechos papilla al PRI y PVEM.
Esto fue contrario a lo que pregonó la dirigencia del partido de Andrés Manuel López Obrador, quien en voz de la secretaria general de morenos, Yeidckol Polevnsky Gurwitz, aseguró que las autoridades electas de su organización política no haría alianzas con ningún partido y que en el caso de los congresistas, estos sólo apoyarían las iniciativas que fueran en beneficio directo de la población y que de preferencia, serían ellos quienes las propiciaran, absteniéndose de hacer “bola” con el resto de los diputados.
Sin embargo, Juan Ortiz Vallejo justificó el unirse de manera abierta al PAN, pues aseguró que la dirigencia estatal en manos de Pech Várguez “no lo dejan hacer nada”, que llevan a Morena como cangrejo para atrás y que sólo usa las redes sociales para declarar “babosadas”, cosa que no desmentiremos, ni afirmaremos, sino todo lo contrario, jajajajaja.
De redes sociales y “babosadas”
Ya que hablamos de esos temas, de enviar mensajes en redes sociales, fue por ese medio que Pech Várguez dijo que los diputados Juan Ortiz y Silvia Vázquez “no quisieron coordinarse con la dirigencia estatal del partido, ni buscaron el consenso del partido para hacer acuerdos”, o sea, que andan como perros sin mecate, buscando un hueso donde se los den, así lo dio a entender cuando agregó que: “han dado el apoyo abierto a partidos antagónicos, antepusieron sus intereses personales a los de Morena”.
A eso agregue usted que dijeron que su líder estatal declara puras “babosadas” en internet, lo que José Luis Pech consideró que: “han denostado y ofendido a las autoridades del partido”, naaaa, ni se notó.
Perdieron el piso
La línea marcada para los legisladores, desde la parte más alta de su dirigencia fue muy clara, “no votar a favor de ninguna propuesta del PRI o el PAN”, instrucción que no acataron.
José Luis Pech dijo que “algunos cuando llegan al poder sienten que están por encima de los intereses del partido -pierden el piso y quieren volar- y el comportamiento de los diputados ha hecho perder a Morena una oportunidad histórica de posicionarla como protagonista del cambio, porque decidieron asumir el papel de comparsa de los partidos que más han dañado el país”.
La pregunta obligada es: ¿A qué intereses obedece este cambio repentino en la postura esperada de los legisladores de Morena?
Los que saben de política aseguran que fuerzas maquiavélicas de un inmenso poder político y económico, aprovechan el vacío de liderazgo del primer priísta del país, Enrique Peña Nieto, para mover a las organizaciones políticas y a sus miembros, con el fin de concretar un plan maestro, en el que se incluye desbalancear la fuerza y el peligro, que para esos grupos de interés representa, Andrés Manuel López Obrador, rumbo a la contienda política del 2018.
Por lo pronto, a nivel estatal, el Congreso tomó una figura a modo, al próximo gobierno del estado originado de la alianza PAN-PRD, lo que puede resultar en un arma de dos filos.
Le faltó Pepto Bismol
Después de que el lunes pasado, faltó a su segundo día de trabajo como legisladora, “por motivos de salud”, lo que provocó que los panistas y perredistas trapearan el piso del Palacio Legislativo con los priístas y los tucanes verdes, a quienes no dejaron, ni las migajas de las presidencias de las comisiones del Congreso, la diputada local del Partido Revolucionario Institucional, Candelaria Ayuso Achach, rechazó los rumores de que renunciará a su partido para apoyar el proyecto del gobernador electo, Carlos Joaquín González.
El runrún se incrementó como fogata a la que se le echa gasolina, cuando la madre de la legisladora y ex alcaldesa de Cancún, Magaly Achach fue captada en fotos, mientras -con sus tricolores manos- hacia la “carlos-señal”, en compañía de algunas distinguidas perredistas.
Empero, la novata legisladora, Candelaria Ayuso, afirma que no acudió a la sesión por sufrió gastroenteritis o lo que es lo mismo, le dio una diarrea de esas que no sales del baño. No es para menos, después de que en la primera sesión del Congreso, su partido, el PRI, fue hecho trizas, a cualquiera se le suelta el estómago; sin embargo, que alguien le diga a Ayuso Achach que existe el, Pepto Bismol, electrolitos líquidos y en el último caso pañales para adultos, lo que le hubieren sido de utilidad, al menos sólo para presentarse a votar, jijijijiji.
No hay derecho, joven
Que si a la diputada Candy Ayuso le dio “chorrillo”, después del fracaso de su partido en el Congreso, “no hay derecho, joven” de que los priístas la traten de traidora, así la defendió el legislador perredista, Emiliano Ramos Hernández, presidente de la Comisión de Hacienda y Cuenta Pública. Mira tú, ¡para defenderla ahora tiene un caballero con armadura y corcel!, ahhhhh, ternurita.
Aunque es tema de otro partido, dijo Emiliano Ramos, no permitirá que los tricolores traten de linchar a su compañera de legislatura. Que es una falta de humanidad y de respeto a la salud de alguien por un tema médico, que en lugar de recibir el respaldo y la comprensión de su grupo parlamentario, le dé un trato como el que le está dando. Por lo pronto, Emiliano Ramos envió “todo su cariño y su solidaridad” a Candy Ayuso; diuuuuuu, mira lo que una diarrea puede provocar.
Otro que se justifica
Que si bien a él no le dio diarrea, pero si provocó que, a los priístas les diera “chorrillo” del coraje, fue el legislador local Juan Carlos Pereyra Escudero, quien renunció al PRI y se declaró independiente.
Sus motivos para hacerlo, dijo, fue que en el tricolor hubo imposiciones, desaciertos y negativas a concertar al interior del Partido Revolucionario Institucional, lo que provocó su dimisión. Uyyyyy, ¿sería su postulación como diputado plurinominal uno de esos desaciertos que hizo el PRI?; Naaaaa, o ¿si? Tantán.