EN ÓRBITA Marcelo Salinas
@msalinas21
Esta semana serán los debates entre 18 candidatos para cuatro presidencias municipales: en Othón P. Blanco será hoy; mañana en Solidaridad; en Benito Juárez el día 20, y en Cozumel, el próximo jueves 21. Todos serán a las 8 de la noche en las instalaciones del Sistema Quintanarroense de Comunicación Social de Chetumal.
Antes de estos “oficiales” se desarrolló uno para Benito Juárez, en La Salle Cancún, entre cuatro de los cinco que habían confirmado: faltó José Luis Toledo Acosta, a quien le notificaron la invalidez de su candidatura. Fue organizado por la Coparmex y el Instituto Electoral, por lo que ostentó toda legalidad y legitimidad requerida.
La pregunta obligada es: ¿Quién lo ganó? Y el cuestionamiento cobra relevancia porque se trata del municipio más importante en términos político-electorales, y por toda la atención acaparada durante las últimas semanas por aquello de las impugnaciones.
En los círculos de análisis dan por ganadora a Mara Lezama, de Morena, por diversos motivos. Primero, porque asistió al encuentro; una estrategia distinta a la de sus homólogos de otros municipios, como Hernán Pastrana, quien no asistió al del pasado sábado 16 en Grupo Sipse, culminado con rotundo éxito. Tampoco se presentaría al de hoy.
Al encarar a sus rivales, Lezama ratificó que su estrategia no es la de López Obrador en 2006, cuando el puntero no arriesgaba su ventaja (para evitar ataques o errores), aunque sí la de Pastrana. En ella, más confianza que temores.
Segundo, gracias a la contundencia del mensaje, tan notoria como efectiva. Siempre cómoda ante los micrófonos, su interacción con los moderadores y el público demostró un potente dominio escénico.
Tercero, por un lenguaje común y compartido con miles de cancunenses, propio también de AMLO (quien le brindó días antes un tremendo espaldarazo por video), en las temáticas que ya son discusión nacional: combate a la corrupción y a la impunidad, así como más transparencia y rendición de cuentas, entre otras.
Aun así, es justo reconocer el desenvolvimiento del independiente Isaac Janix Alanís, quien presentó un diagnóstico completo, con propuestas y cifras, logrando un mejor “click” con los electores del que podría presumir Niurka Sáliva, del PES, a quien situaban entonces en el segundo lugar.
Algunos podrán estar en desacuerdo en torno a quién ganó; lo irrefutable, es acerca de los perdedores: los que no asisten a estos foros, los que desalientan la participación, los que infunden miedo en redes sociales, los que fomentan la “guerra sucia” y los que miran impávidos el rumbo del estado.
Es una semana definitoria.
Seguridad: tarea de todos
En la Reunión Nacional del Comité Técnico de Adolescentes en Conflicto con la Ley Penal, realizada recientemente, el presidente del municipio Benito Juárez, el anfitrión Remberto Estrada Barba, concluía que la falta de oportunidades de desarrollo, así como la inmensa brecha entre los que tienen todo y los que carecen de todo, es un caldo de cultivo para que muchos jóvenes tomen la salida falsa de la violencia y la delincuencia.
Ante representantes de los otros dos niveles de gobierno, la primera autoridad reconoció: el tema de los adolescentes en conflicto con la ley penal es un pendiente que aún tenemos la sociedad y el Estado con ese grupo. Porque cada día, y a más temprana edad, tanto niños como jóvenes se involucran con bandas criminales, por la necesidad de recursos económicos, y en innumerables ocasiones, también atraídos por las drogas, la vida fácil y la ausencia de opciones para progresar.
Es una realidad innegable. Porque cuando se analizan las incidencias delictivas, por ejemplo en Cancún, se suele culpar solamente a las autoridades. Se les achaca erróneamente que nada hacen o que no les importa pues ya se van, pero se ignoran otros factores, como que la inseguridad es un cáncer nacional; que la familia, los educadores y los vecinos también deben aportar lo necesario; que faltan más denuncias de testigos para avanzar en investigaciones; que la falta de arraigo de los oportunistas se convierte a veces en un problema, y que cada quien debe asumir su responsabilidad.
Persiste, entonces, un consenso indudable: urge tratar la creación de un programa integral de carácter socioeducativo que incluya a los jóvenes, a su familia y a su entorno, para evitar que se conviertan en los futuros ocupantes de los reclusorios.
En Cancún se ha dado tratamiento y orientación psicológica a 2 mil 706 menores, quienes fueron puestos a disposición del juez cívico por la comisión de faltas administrativas; la más común es perturbar el orden público. La orientación que se brinda es a menores y sus parientes, con seguimiento de personal calificado para el manejo de crisis familiares, mediación comunitaria y certificado en materia de derechos humanos. Aun así, la reincidencia es una variable que perdura.
Por eso cabe insistir: ¿de quién es la responsabilidad? La culpa no cae al piso.
Mientras no se asimile la complejidad del fenómeno delincuencial y todos no asuman de una vez por todas su cuota de obligación con las actuales generaciones, estará latente el riesgo de que repliquen las conductas antisociales que tanto daño le provocan a nuestro estado.
Bien ha dicho Estrada Barba, quien por cierto encara estos flagelos en su demarcación: la prevención del delito es tan importante como el justo castigo y la reinserción social posterior.
Hagamos, pues, la tarea completa.
Berrinches en Puerto Morelos
Desde que era delegación, y después como alcaldía, Puerto Morelos fue víctima del éxito de Cancún, al ser parte de Benito Juárez. El entonces traspatio siempre estuvo condicionado a las necesidades del destino turístico líder; es decir, que si alcanzaba, algo le tocaba.
A fines del 2015 se convirtió en municipio. En el más joven del país, al inicio faltaba todo por hacer, considerando esas muchas décadas de rezago y carencias.
Laura Fernández, la primera presidenta municipal, recibió en el 2016 sólo 10 policías, comisionados de Benito Juárez. Ya son 120 agentes propios. Recibió también dos patrullas (una descompuesta y otra con desperfectos), y ahora son 26.
Se avanza de manera espectacular. La fórmula del éxito ha sido un equipo de trabajo comprometido y profesional, que empezó desde cero, elaborando marcos jurídicos, manuales de procedimientos y todo el andamiaje netamente administrativo. Tras ello inició el desarrollo de proyectos, arrastrando la pluma. Sin duda, ha sido una tarea titánica.
¿Qué es lo nuevo? Fernández Piña aspira a la reelección. Para ello se compromete a abatir la falta de drenaje, banquetas, pavimentación y luminarias. Además, a multiplicar los programas de desarrollo social.
Para ello deberá seguir gestionando recursos de la Federación y recurrir al lobby, tanto de diputados federales como de senadores, ya que el dinero propio no alcanzan más que para la administración, principalmente los relacionados con la recolección de la basura, la seguridad, el mantenimiento de los parques, entre otras acciones.
¿Entonces por qué la atacan? Porque en ese progreso debió erradicar viejas prácticas y vicios, convocando a la unidad de todos, lo que molestó a unos cuantos. Y en esta coyuntura electoral, cuando la candidata se presenta con logros ante los que ya le dieron su confianza, los detractores recurren a la “guerra sucia”: tergiversaciones como escudo y mentiras como armas.
En una competencia abierta, libre como siempre se quiso, debieran apostar a la estrategia convincente y no al burdo berrinche.
