Mientras que las administraciones actuales de las delegaciones de Semarnat y Profepa dedican sus esfuerzos operativos y de comunicación a temas menores o de plano muy lejanos a la geografía de Quintana Roo, hay asuntos que reclaman de una atención urgente en el plano de la protección de los recursos naturales. Ejemplo número uno es la zona de manglares de Puerto Morelos, un novel destino turístico, cuyo desarrollo turístico acelerado y la injerencia de actividades humanas, empujan a una crisis de alteración de flujos hídricos naturales, con la afectación de especies de flora y fauna, en muchos casos con criterios de protección.
Actualmente Puerto Morelos cuenta con más de cinco mil habitaciones hoteleras, más que las del inventario de la vecina Mérida, que cuenta más de 400 años de antigüedad. Al desarrollo hotelero de este detino quintanarroense, se le debe sumar el crecimiento de su mancha urbana, tanto en el centro como en la colonia Zetina Gasca, donde la falta de un sistema de drenaje representa la mayor amenaza para el equilibrio ecológico de toda la zona.
En este sentido, es un fatalismo que de mantenerse la inercia actual, de afectación y desatención, los efectos de esta alteración medio ambiental tendrán que impactar a la principal actividad económica que le da sentido, y que es finalmente el turismo.
De acuerdo con un estudio del Centro de Investigación Científica de Yucatán, A. C. (CICY) y de su Centro para Estudios del Agua (CEA), desde 2010 se vino advirtiendo de esa dinámica de alteración medio ambiental en Puerto Morelos y su zona de manglares, donde se determinó que el desarrollo “ha afectado los patrones hidrológicos”. Esto, en parte por los efectos del paso devastador del huracán `Wilma´, pero también por la actividad humana sin vigilancia ni restricciones.
“Las calles restringen el flujo de agua; bloquean la conexión al mar; Disminuyen el flujo de nutrientes, con la degradación consecuente del ecosistema”.
La crisis que ha de venir, tuvo su origen de alguna manera en el efecto de un fenómeno natural, que fue definitivamente el paso de `Wilma´, en octubre de 2005; sin embargo, no se echaron a andar medidas de mitigación ni se advirtió y mucho menos se prohibió a los desarrolladores, cuyas actividades acentuaron ese deterioro.
“Los humedales tenían agua por que las calles se inundaron (luego del paso del huracán). Los manglares están muertos en algunos lugares”.
Y el efecto consecuente es la contaminación, acentuada por la actividad humana.
De plano, se halló que hay descarga de desechos: se encontraron coliformes fecales a niveles igual a desechos sin tratamiento, presuntamente provenientes de las colonias de Puerto Morelos”.
Y explica que los cambios de esos patrones han sido negativos para los ciclos de crecimiento naturales de diversas especies.
En este caso se debe reiterar la importancia de esos manglares afectados, pues su función es la de capturar sedimentos de aguas superficiales antes de alcanzar el mar. Capturar contaminantes de aguas subterraneas y aguas superficiales; un papel muy importante es el de proteger el mar y el arrecife, pues esos humedales son hogares de cocodrilos, aves, peces, entre otros…. Los manglares cuidan y protegen otros recursos naturales Los recursos naturales apoyan el turismo y la economía”.
En este panorama, llama mucho la atención que las delegaciones de Semarnat y Profepa (la primera por cierto acéfala desde la renuncia de su titular), se mantienen más bien ocupados en temas menores, o bien informando sobre las actividades que realizan sus pares de otras entidades de la República.
ADVIERTE TESORERO DE TULUM DE DAÑOS AMBIENTALES
Otro caso que ilustra la grave omisión de las delegaciones de la Semarnat y de la Profepa, es el señalamiento directo que hizo en días recientes el tesorero de Tulum, Oscar Conde Canto, quien hizo notar que hay una serie de propietarios de inmuebles que han pasado por las normativas ambientales, al convertir residencias en hoteles sin tomar en cuenta restricciones ambientales que les compete sancionar a esas dependencias.
Precisó que esos daños se presentan sobre todo en la zona de Akumal Sur, donde los propietarios aprovechan el vacío legal de la falta de municipalización para eludir a la autoridad municipal, pero donde a todas luces tienen jurisdicción tanto la Profepa como la Semarnat.
Y por su parte, esas dependencias presumen del aseguramiento de individuos de especies protegidas, cuando grandes extensiones de territorio quintanarroense atraviesa por andanadas que lo están destruyendo.
COZUMEL, SEDE DE CONVENCIÓN ANUAL DE CRUCEROS
El gobernador Roberto Borge Angulo, acompañado por Michelle Paige, presidenta de la Asociación de Cruceros de la Florida y El Caribe (FCCA), anunció hoy que esta isla será sede de la 22ª Convención Anual de Cruceros, del 5 al 9 de octubre próximo.
En el anuncio, el jefe del Ejecutivo, quien también estuvo acompañado por el presidente municipal, Fredy Marrufo Martín, y la secretaria de Turismo del Estado, Laura Fernández Piña, dijo que esta será una gran oportunidad para que los empresarios muestren la calidad y diversificación de los servicios que hacen de Cozumel líder en recepción de cruceros en el Caribe Occidental.
“Este evento, que esperamos inaugure el presidente Enrique Peña Nieto, es parte de lo que he trabajado intensamente con la FCCA como presidente de la Comisión de Turismo de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), al igual que las negociaciones para que los cruceros vuelvan al Pacífico Mexicano y el lanzamiento de proyectos como el muelle de cruceros de Isla Mujeres, que será un incentivo para Cozumel”, dijo el jefe del Ejecutivo. @Antoniocallejo