Por Antonio Callejo
www.polemicarevista.com / www.callejotv.com / www.revistavortice.com
+ La esposa de CJ, Gabriela Rejón, le enmienda la plana a su marido
+ «No sabemos por que ‘color’, pero mi esposo será candidato
+ Amenaza y dice que si «el partido se equivoca nuevamente, lo va a lamentar»
Está acostumbrado a quedarse en la raya. A quejarse entre dientes, rumoreando sin atreverse a decir las cosas abiertamente y a lamentarse entre sus escasos allegados de que no obtiene lo que «merece», pues como es bien conocido, los miembros de su familia, consideran por alguna razón, que nacieron para ser candidatos naturales del PRI a la gubernatura.
El actual secretario de Energía, el hermano mayor, Pedro Joaquín Coldwell, lo fue y llegó al cargo muy joven.
Ady Joaquín, se fue a dormir tranquilamente luego de que, a la sazón, la designó el entonces presidente, Ernesto Zedillo, sin esperarse el diametral cambio de señal ordenado por Mario Villanueva Madrid, cuyo liderazgo le dio para torcer y quebrar la orden presidencial. Así llegó otro Joaquín, pero no del clan de Don Nassim, sino el chetumaleño Joaquín Hendricks.
La historia alcanzó otra vez a Carlos Joaquín, quien mantiene su estilo de quejarse de algo que no tiene… De algo que no es.
Pero la que ya no toleró esa falta de decisión… Esa falta de arrojo para lanzarse y ganar o perder, fue su esposa, la yucateca, Gabriela Rejón de Joaquín, quien por cierto siempre ha pedido que se le cuente como miembro de la llamada ‘Casta Divina’ del vecino estado.
En el festejo de su cumpleaños, ante unas 450 personas, no aguantó más la indefinición de su esposo y de plano sentenció que Carlos Joaquín será candidato a la gubernatura.
Y precisó que no será necesariamente por el partido donde ha prosperado la familia Joaquín.
«No sabemos todavía por qué color… Esperamos que sea por el partido (el PRI), porque a mi marido le pidieron que se alinie y él lo ha hecho… Pero si el partido se vuelve a equivocar, entonces le va a costar… Si el partido vuelve a cometer el error, pues entonces le va a costar»
Y en ese tono, Rejón de Joaquín dio una explicación que nunca se atrevió a pronunciar su marido:
«Mi marido quiere cumplir su objetivo y no sabemos si va a ser fuera (del PRI), pero si se comete otra vez el error, vamos a necesitar el apoyo de todos ustedes».
Se trata de la primera ocasión en la que un representante directo del ex subsecretario de Turismo, finalmente admite su interés por ser candidato a la gubernatura, aunque sea fuera del Revolucionario Institucional.
Porque hace seis años, cuando también manifestó su interés de ser el abanderado priista, sólo alentó rumores en ese sentido, pero los dejó correr sin confirmar o negar nada.
Hoy ya está más claro:
Quién mejor que su esposa para decir lo que ‘Carlos quiso o quiere decir’.
Es evidente que en el PRI, hablando de su cúpula nacional y local, el marido de Gabriela Rejón no está seguro de tener las cosas a su favor.
Muy al principio de este proceso sucesorio, él había dicho que esperaba la «invitación del presidente para participar».
Nunca fue invitado y esperó hasta el último momento para dejar la subsecretaría para hacerse presente en la puja por la designación priista.
Y ahora que sigue sin ver claro, ya le empezó a allanar el camino su esposa.
Pero, la verdad sea dicha, Carlos Joaquín no ha cambiado su estilo cauto, pasivo y medroso.
La que se cansó de eso fue su mujer. La que explotó.
Ahora falta ver si él prefiere enfrentar a su partido y asumir las consecuencias, tal y como viene el proceso, o de plano le entrega entera la batuta de su carrera política a su mujer.
Y hace como ella le indica.
Primero tiene que salir a respaldar en sus dichos a su esposa, si no quiere que en adelante le siga componiendo la plana y el discurso, diciendo ‘lo que Carlos quiso decir». @Antoniocallejo