Sin definir aún del todo sus candidaturas en Quintana Roo, el partido Morena sigue acumulando frustraciones y rencores entre propios y aliados, por esa forma tan digamos, “por sus pistolas”, que tiene su coordinador estatal de hacer las cosas. Aunque éste bien se cuida las espaldas y sostiene que todo lo sabe y lo avala López Obrador.
En abierta ruptura ya con sus coaligados del Partido del Trabajo y de Encuentro Social por supuestamente incumplir los acuerdos a que habían llegado, el doctor José Luis Pech, al que acusan aquellos de quererse comer solo el pastel electoral, sigue corriendo los riesgos de exponer el proyecto de AMLO, lo cual no parece importar mucho en tanto él y sus favoritos obtengan los mayores privilegios.
Sin contar que ya les renunció su prospecto a la Presidencia Municipal de Tulum por haber sufrido amenazas, en los últimos días tanto Hernán Villatoro como Gregorio Sánchez, dirigentes del PT y el PES, oficializaron su deslinde de Morena y anunciaron que si bien apoyarán la candidatura de AMLO en la entidad, se irán solos en la búsqueda de alcaldías, diputaciones federales y senadurías. Que no necesitan las vejigas de Pech para nadar, aseguran, y que a ver de a cómo les toca en las urnas, advirtieron.
Primero fue Villatoro el que anunció que ya no irían en alianza con Morena en Quintana Roo y que habían iniciado el procedimiento formal con su comité nacional para invalidar el convenio registrado ante el Ieqroo y poder registrar en abril a sus propios candidatos en los 11 Ayuntamientos locales. A decir del líder petista, Morena no ha demostrado ninguna voluntad política para respetar lo acordado ni quiso incluir sus propuestas en las posiciones que se disputarán en julio.
Todavía más fuerte y directo se lanzó su homólogo del PES, “Greg” Sánchez, quien acusó de traición a la dirigencia estatal del partido lopezobradorista y confirmando la ruptura de la alianza “Juntos Haremos Historia”, anunció también que contenderán con sus propios candidatos a presidentes municipales, diputados federales y senadores.
“Morena traicionó los acuerdos que teníamos. A eso no se le puede nombrar de otra forma que no sea traición, porque firmó acuerdos ante el INE, ante el Ieqroo, que no respetó hoy y eso es una traición”, dijo Sánchez Martínez bastante molesto.
Y es que la gota que derramó el vaso fue la decisión que asumió Pech en la última reunión de coordinadores de partidos aliancistas con el comité nacional de Morena, donde de manera unilateral anunció el cambio de los géneros del candidato a diputado federal en el Distrito 01 de hombre a mujer (donde el PT postulaba a Lenin Amaro) y de mujer a hombre en el Distrito 03 (donde apoyaban a Lorena Martínez), lo que prácticamente les anuló las posibilidades de competir. Una vez más, Pech echó mano del nombre de Andrés Manuel para justificar esos cambios y le aventó la “papa caliente” al Instituto Nacional Electoral, asegurando que éste había ordenado los cambios.
Pero dicen los que saben que el INE no pudo ordenar cambiar la paridad de género en los Distritos 01 y 03 ya que dicho instituto no interviene hasta que que se hayan inscrito los candidatos, proceso que empieza hasta el 11 de marzo. Y si fuera para equilibrar la paridad de género, cambiaría en todo caso -por poner un ejemplo- los cuatro Distritos a mujer, pero lo que propuso Pech fue sólo un enroque que dejaría a Quintana Roo, por lo tanto, en la misma situación.
El unilateral cambio de género que impulsa el coordinador morenista no ayuda a la ya por sí complicada negociación entre los tres partidos de la resquebrajada alianza, ya que si ese fuera el caso pedirían lo mismo en la mayoría de los estados del país donde siguen también negociando candidaturas, situación que contravendría lo acordado en la asamblea de Morena encabezada por el propio AMLO, quien advirtió que el género en todos los Distritos federales del país, así como de las Presidencias Municipales, se mantenían firmes y eran inamovibles.
Queda por averiguar también en qué se basó la regidora de Morena en Solidaridad para impugnar la candidatura de Laura Berinstain a la Alcaldía, porque supuestamente cambiaron el género para nombrarla siendo que en la pasada elección fue mujer (en la que compitió precisamente ella). En este caso, de consumarse el cambio de género en los Distritos 03 y 01 podrían meter a Morena a otras impugnacionaciones que, en definitiva, en nada abonan al proyecto de Andrés, el que según Pech todo lo sabe y todo lo aprueba.