Ya están en la pista los caballos que aspiran a la candidatura del PRI al gobierno del estado. Son seis que algunos reducen a dos o cuando mucho a tres. Entre los seis no hay ninguna mujer. Y no es que no haya ninguna con los suficientes merecimientos pero en la política, a pesar de lo que se diga, sigue prevaleciendo el machismo e incluso la misoginia. Es decir, a las mujeres todavía no se les da el lugar que merecen y por el que han luchado desde siempre.
Es en las presidencias municipales donde las mujeres tendrán la oportunidad a la que tienen más que suficiente derecho. La equidad de género proclamada en la recientemente aprobada reforma política es tramposa. Habla de equidad en la integración de las planillas, pero no en las presidencias municipales. O sea, la intención es incluir a las mujeres en la lista de regidores y nada más. ¿Este es el espíritu de la equidad de género de la reforma política?, Es un espíritu chocarrero, en el mejor de los casos.
En los municipios de la entidad hay mujeres con la suficiente trayectoria y capacidad para ocupar cualquier presidencia municipal. Destacan por sus merecimientos y sus cualidades humanas y políticas, aunque hay otras que sólo se basan en sus “encantos” como arma de seducción política.
Por ejemplo, en Cancún hasta el momento no hay hombres que tengan, ni en el PRI ni en los demás partidos, el arraigo suficiente ni la aceptación social que los ubique como prospectos con reales posibilidades. Es curioso pero en Cancún los hombres no han crecido políticamente al grado de que se les considere como prospectos viables para la presidencia municipal.
Mujeres, en cambio, hay varias y muy destacadas. Hoy vamos a referirnos a Gabriela Rodríguez y después, en entregas posteriores, a las demás. Gabriela es la Oficial Mayor del Ayuntamiento de Benito Juárez, desde donde está realizando una labor que está a la vista. Generalmente las actividades de la Oficialía Mayor se circunscribían al ámbito de la administración interna del Ayuntamiento. Ahora su presencia se nota en diversos aspectos de la actividad municipal, con orden y eficacia en la gestión de los recursos humanos y materiales del Ayuntamiento.
Como diputada, Gabriela impulsó iniciativas de ley, entre ellas las de equidad de género. Y como secretaria de Turismo su tarea oportuna y responsable durante el azote de huracán “Wilma” fue decisiva para la protección de los miles de turistas. Gaby es mucho más.