Félix González Canto desapareció del ámbito político-electoral durante el mandato de su sucesor, Roberto Borge Angulo, que está por terminar. Restringió sus actividades públicas a su responsabilidad en el Senado y si acaso activó sus redes sociales, lo hizo siempre con temas relacionados con su ámbito personal y familiar. Se entiende en términos de las reglas no escritas de su partido.
No tanto de la misma manera en el caso del ex presidente, Felipe Calderón, quien nunca dejó de irrumpir en la escena, pues finalmente él fue sucedido por un priísta.
El caso es que ambos políticos, Félix González y Felipe Calderón, están en plena confrontación, haciendo un `pulso´ entre los ciudadanos, probando su capital electoral, en una batalla que apenas comienza y que tiene como escenario a la isla de Cozumel.
Desde el primer momento en el que resultó elegido Mauricio Góngora Escalante como abanderado del PRI para contender por el gobierno del estado, Félix González asumió un papel relevante en la llamada `operación cicatriz´, reuniéndose con priístas que resultaron afectados con el derrotero que empezó a tomar el PRI en la asignación de candidaturas y responsabilidades.
No es nada raro. González Canto se ha distinguido por su conocimiento en temas de ingeniería electoral, muy afecto a la revisión de encuestas y al trazado de estrategias para favorecer a su partido, o bien, para reducir la influencia de sus adversarios.
En este caso, se le ha notado particularmente interesado en lo que ocurre en su natal Cozumel, donde todo apunta a que será Gina Ruiz de Marrufo, la esposa del actual presidente municipal, quien contienda para ese mismo cargo por los colores del PRI.
Fredy Marrufo, el presidente municipal, no sólo es amigo y en algún momento colaborador de González Canto (fue su Tesorero durante su mandato estatal), sino que además es primo en primer grado de su esposa, Narcedalia Martín de González.
Un ingrediente interesante lo hacen los resultados de la última elección local, en la que resultó ganadora de la diputación local por esa demarcación la panista Perla Tun, a quien algunos analistas le adjudican posibilidades de ganar la presidencia municipal.
Y el otro ingrediente aún más interesante, es que el propio ex presidente Felipe Calderón y su esposa, Margarita Zavala (quien de paso construye su candidatura presidencial rumbo al 2016), decidieron apoyar con todo a Perla Tun, con la idea muy clara de agenciarse Cozumel para el blanquiazul.
Félix González Canto y Felipe Calderón, dicho sea de paso, mantuvieron una relación institucional de cara a los ciudadanos. Sin embargo, detrás de esa contención de emociones y en la inercia de su gobierno, se registró una gran tensión que, ahora es evidente, se mantiene hasta ahora.
Felipe Calderón fue crudo a la hora de acusar a los gobiernos estatales del PRI por adquirir deuda en su sexenio. Pero también fue señalado en su momento de privilegiar con un trato fiscal especial a los gobiernos de su misma bandera política.
González Canto ha señalado, en reiteradas ocasiones, que la deuda que contrajo durante su mandato fue el resultado de la política de `estrangulamiento´ a la que fue sujeto por parte del gobierno calderonista.
Sin esos créditos, no habría podido funcionar eficientemente el gobierno estatal, ha dicho González Canto.
Y son temas que no se olvidan. Sobre todo, entre los actores que participaron directamente de esa situación.
Hoy ambos políticos están por protagonizar una batalla muy intensa para ganarse el favor ciudadano el cinco de junio.
Felipe Calderón y su esposa Margarita Zavala estuvieron presentes durante el registro de Perla Tun como pre-candidata a la presidencia municipal.
Hay que recordar que Felipe Calderón apoyó, al final de su mandato, a Joaquín Ortega Joaquín, quien llegó a la presidencia municipal luego de renunciar al PRI. De por sí, Calderón Hinojosa es un amigo cercano de la familia Joaquín. En numerosas ocasiones visitó la isla, tanto de forma oficial como en sus periodos vacacionales, y en algunas de esas estancias visitó a Don Nassim Joaquín, el jefe del `Clan Joaquín´, al que pertenece desde luego el secretario de Energía, Pedro Joaquín y su hermana, Addy Joaquín, quien ya fue dos veces diputada y una vez senadora por el PAN, aunque también tuvo sus orígenes en el PRI, al que renunció luego de no obtener la candidatura al gobierno del estado.
Sus intereses y afectos en Cozumel están más que probados y a la vista. De manera que será muy interesante observar si es capaz de tocar los resortes ciudadanos para apoyar a Perla Tun en su campaña por la presidencia municipal.
Y en el otro lado, González Canto está decidido a empujar con todo la campaña de Gina Ruiz de Marrufo para alcanzar esa emblemática presidencia municipal.
Laura Fernández por el Verde, un logro de Félix González Canto
Parecía que el Partido Verde se llevaba, como dicen, `La Quinta y los mangos´. En una primera negociación, se le otorgó mano en la designación de candidato a la presidencia municipal de Benito Juárez (Cancún), en la persona de Remberto Estrada. Hasta allí se entendía en razón de los números logrados por el verdeecologista en la elección por la diputación federal. Sin embargo, se anunció que al partido de `El Niño Verde´, también le tocaría poner candidato en Puerto Morelos.
Luego de una maniobra no necesariamente fácil, resultó que Laura Fernández Piña será presentada por el Partido Verde encabezando la planilla por ese recién creado municipio.
Félix González Canto `jaló la carreta´ de la candidatura incómoda de Jorge Emilio González para hacerlo llegar al Senado de la República. Si alguien podía reclamar ese favor, era precisamente el ex gobernador y lo hizo a favor de Fernández Piña. Todo cobra sentido.
Mario Machuca es `diputado sandía´
Al asumir la suplencia en lugar de Remberto Estrada Barba, pre-candidato del Partido Verde a la presidencia municipal, el croquista Mario Machuca se presentó emocionado ante su líder camaral, César Camacho Quiroz, para ponerse a la órdenes y para preguntar qué lugar ocuparía en la Cámara de Diputados.
Esperaba desde luego, sentarse en el lugar que corresponde a la bancada priísta de la `cámara baja´, para codearse con los altos dirigentes de su partido.
Grande fue su sorpresa cuando le fue asignada una curul en el área que corresponde al Partido Verde, el cual lo postuló en alianza como suplente en la candidatura que encabezó Remberto.
Fue nuevamente a preguntar porqué y, luego de una espera de varias horas para que lo escucharan, el propio Camacho Quiroz le dijo que no sólo tenía que sentarse en la bancada del verde´, sino que además se tenía que presentar como un diputado más de ese instituto político.
— Mire diputado, todos esos diputados que ve allá son `sandías´… son como usted, verdes sólo por fuera aunque por dentro siguen siendo bien colorados como todos los priístas.
Machuca no había caído en la cuenta de que, en primer lugar, no es tan importante como para que el PRI lo presuma dentro de sus filas. Y en segundo lugar, que si todos los diputados priístas que están en la bancada del Verde se salen, entonces mermaría el número de esa bancada, que tiene 42 legisladores, y entonces los representantes de Morena (que son 36), lucirían como si fueran una fuerza política más importante que el aliado del PRI. Es cuestión de percepción y apenas lo entendió el croquista.
Por cierto, también le dijeron que evitara ponerse el reloj `Hublot big bang´ de 350 mil pesos que usa a diario. Pero el reconvino: `Si soy chilango, yo aquí estoy como en mi casa´. “Ah, ta bueno”, le contestaron.