DESTRIPACUENTOS
Por Antonio Callejo
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+ Actitud sobria, sin triunfalismos y tendiente a `sanar heridas´
+ Firme en auditorías y aplicación de la ley, sin escuchar alientos vengadores
+ Un gabinete ciudadano, sin presión de pan-perredé
Carlos Joaquín sí se reunió con el gobernador saliente, Roberto Borge. Es necesario aclararlo porque en estos tiempos de profusa información incierta, no sólo se especuló sobre lo contrario, sino que hubo quien se fue con la `finta´ e informó literalmente que nunca hubo tal encuentro. `Que fue una llamada telefónica´.
El propio gobernador electo lo confirmó a varias personas que le preguntaron sobre esa duda. Se trató de una reunión de trabajo y es necesario destacar que en el caso de los gobernadores priístas que también están por terminar su mandato, en ningún caso han sostenido un cara a cara con sus virtuales sucesores. Carlos Joaquín fue el primero que lo hizo.
Y otro tema importante que se empieza a dilucidar, es la actitud que está asumiendo quien será el nuevo inquilino de la Casa de Gobierno en Chetumal, es su accesibilidad e iniciativa para empezar lo que se conoce como la `operación cicatriz´.
Quienes lo han visto en estos días tan recientes a su triunfo en las urnas, destacan que en ninguna manera está asumiendo alguna actitud `triunfalista´.
Por el contrario. Si aborda esos temas, refiere que entiende a la perfección las altas expectativas que generó entre la ciudadanía su campaña, por el copioso resultado de las votaciones. Márgenes de votación como los de Chetumal, Cozumel e inclusive Cancún, que superaron los números históricos con creces, le presentan un panorama de mucho trabajo para empezar a cumplir con sus ofertas y compromisos de campaña lo más pronto posible.
En sus declaraciones ya empezó desvelar también cómo pretende abordar a una sociedad quintanarroense que, si bien se desbordó mayoritariamente para favorecer su candidatura, también hay otro sector importante que no logró hacer llegar a su candidato.
Sabe, porque lo ha declarado literalmente, que el conjunto de la sociedad es un nuevo universo que debe ser atendido sin distingos. Como un todo. Por eso habla de `hacer equipo´ para resolver problemas. No se trata, y esto lo añade quien escribe, de alargar el encono o alentar la fractura.
Sí declaró que está en la disposición de `sanar heridas´ y emprender un gobierno `serio´, `responsable´.
Del gabinete
Es todavía muy temprano para especular sobre el grupo de personas que discernirá para formar su equipo de trabajo. No se está apresurando a tomar esas decisiones porque entiende que el reto es grave y no se puede equivocar. Es decir, no se debe.
No obstante, en este apartado está claro, y es opinión, que los partidos que lo postularon, al menos en el plano local, no deben tener expectativas de ocupar un cargo en el gabinete, o en ningún otro cargo.
Sabemos de los obstáculos que le presentaron los representantes locales de PAN y PRD para impedir que asumiera la candidatura. Esta se `amarró´ desde el centro del país, con las cúpulas de ambos institutos políticos, que generaron las condiciones para allanar esa alianza en el breve margen de tiempo que quedaba en ese momento específico.
Y además, en el caso de los cuadros perredistas y panistas, se debe subrayar que se quedaron con prácticamente todas las candidaturas. Están servidos desde este momento y no pueden ni siquiera ejercer presión para meterse a la repartición de cargos.
Carlos Joaquín, se sabe, va a tomarse el tiempo necesario para ir definiendo. Para revisar currículos y personalidades.
Esta posibilidad la refuerza su calidad de `candidato ciudadano´ que fue, y gobernador ciudadano una vez que asuma el encargo.
Chetumal
La votación del municipio de Othón P. Blanco, y su ciudad capital Chetumal, se volcaron a las urnas en rotundo favor de Carlos Joaquín. Ha dicho ya que debe en gran parte su triunfo a ese suceso histórico que, por tanto, le obliga a atender esa demarcación de manera especial y urgente.
Los chetumaleños quieren a un gobernador cercano. Están habituados a convivir con su mandatario estatal, a verlo llegar a su oficina y a ir resolviendo los problemas cotidianos en contacto cercano con la persona que eligieron. Ese será un cambio notable a partir de que asuma Carlos Joaquín.
De alientos vengadores
Las redes sociales hierven de un ánimo de `ajuste de cuentas´ en el nuevo gobierno.
Este tecleador escribió en entrega anterior que, como cualquier persona, es natural que Carlos Joaquín asuma alguna actitud específica con relación a los agravios que él mismo manifestó haber recibido durante la intensa campaña política. Y aún antes.
Sin embargo, en declaraciones hechas a los medios, en ningún momento le ha seguido la corriente a esos alientos.
Enfatiza que su disposición es en primer lugar la de convocar a un trabajo con la ciudadanía, sin distingos de filias, y que la ley se debe aplicar a secas, sin ningún ingrediente personal. Esto es lo que hay de momento y en la medida que avance el tiempo se irán esbozando todos los aspectos del nuevo estilo que marcará Carlos Joaquín, el gobernador electo para los próximos seis años. @Antoniocallejo
