DESTRIPACUENTOS Por Antonio Callejo
- Israel Lira Salas, titular de esa fiscalía especial en combate al lavado de dinero, enfoca sus baterías a personajes incómodos a EPN y su proyecto sucesorio
- Emiliano Ramos, y probablemente todo el `clan´ familiar no entienden el nuevo contexto. Carlos Joaquín ya no es candidato, es gobernador
Cancún, Quintana Roo.- Es muy fácil entender por qué la detención de Juan Vergara Fernández tiene motivaciones de orden político. Por que si bien fue puesto en libertad, este proceso le impedirá formar parte de un proyecto amplio del gobernador, Carlos Joaquín, en tanto que no podrá seguir con su candidatura a la diputación federal del Distrito 03.
Pero veamos quién lo acusó:
Alonso Israel Lira Salas, titular de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), fue nombrado en diciembre de 2016. Su gestión abarca apenas el 2017 y lo que va de este 2018. Durante este tiempo, sus `golpes´ han sido puntuales y coyunturales y con un contenido `político´ bastante evidente.
Baste decir que ese encargo le fue asignado prácticamente como un premio, luego de haber sido el `descubridor´ de la trama de `lavado de dinero´ de la tristemente célebre Elba Esther Gordillo, la dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
La profesora Gordillo, todo el mundo sabía, acumuló una fabulosa fortuna con el acceso amplio que tuvo en la nómina de la Secretaría de Educación Pública (SEP), además de las compensaciones y favores que recibía en cada entidad, de los respectivos gobiernos estatales.
Pero cuando fue apresada, en evidente respuesta a su oposición a la reforma educativa propuesta por el entonces entrante presidente Enrique Peña Nieto, se le acabó la suerte de ser una aliada del sistema.
En ese entonces, se dijo oficialmente que: “Como director en Procesos Legales en la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), descubrió que la entonces líder del Sindicato Nacionales de Trabajadores de la Educación (SNTE), Gordillo Morales, incurrió en los delitos de operaciones con recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada.
Y fue promovido a la PGR, donde fue nombrado titular de la Unidad de Investigación Especializada en Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita, Fiscalización y Alternación de Moneda de la PGR.
Pero antes, desde ese mismo encargo en la SHCP, fue quien formuló la denuncia contra el para entonces aún gobernador de Veracruz, Javier Duarte Ochoa, y por la cual se abrió la carpeta de investigación por delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita.´
Hay que recordar que la PGR no emprendió la persecución de Duarte por las numerosas denuncias que había interpuesto el entonces candidato y hoy gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, si no por la carpeta que le inició la PGR con la `investigación´ de Lira Salas desde la SHCP.
En diciembre de 2016 ascendido nuevamente, ya nombrado titular de la SEIDO.
Y durante su desempeño, sus `golpes´ más relevantes no tienen nada qué ver con el desmembramiento de redes financieras o de lavado de dinero de capos de las mafias criminales, sino, curiosamente, de personajes políticos.
En octubre de 2017, Lira Salas alcanzó notoriedad otra vez cuando imputó del delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita a Alberto Anaya, dirigente nacional del Partido del Trabajo (PT).
En el comunicado oficial, la PGR dio a conocer su investigación:
“En contra de la persona física María Guadalupe Martínez (esposa del líder del PT) y/o en contra de quienes resulten responsables, mencionando a la persona de nombre Alberto Anaya Gutiérrez, Laura Elena Guerra Martínez, María Mayda Paredes Díaz, Héctor Quiroz García y Carlos Hugo Castañeda, por el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita y financiamiento al terrorismo”.
Anaya acusó al gobierno federal de perseguirlo por razones políticas.
En su cuenta de Twitter, Anaya dijo:
“La campaña sucia de que somos objeto no impedirá que sigamos adelante con el proyecto PT-Morena rumbo al 2018. ¡Ni un paso atrás!”
LA PIFIA DE LAS CAJAS DE SEGURIDAD
Aquí en Cancún son conocidas las `pífias´ de la SEIDO de Lira Salas.
A finales del año pasado ordenó el aseguramiento de una empresa de custodia de valores, llamada First National Security (FNS), donde un juez determinó que incurrió en irregularidades al forzar y sacar el contenido de las más de dos mil cajas que había en el interior.
El propio titular de la PGR acudió a Cancún a disculparse con los afectados, y fue necesario un operativo especial para devolver la pertenencias a las víctimas de ese atropello.
De esa investigación finalmente no se reveló ninguna detención.
JUAN VERGARA, DETENIDO PUNTUAL Y COYUNTURALMENTE
La conclusión de que hay motivaciones políticas detrás de la captura y liberación de Juan Vergara Fernández, ex secretario de Finanzas y Planeación del gobierno estatal, es bastante evidente, a la luz del contexto presentado.
Lira Salas, el titular de la SEIDO, ha seguido una línea de actuación muy lejana a las mafias criminales que tienen en jaque a buena parte del territorio nacional.
Sus baterías, como se ve, están enfocadas en personajes del escenario político y son, curiosamente, aquellos que incomodan al gobierno de Enrique Peña Nieto y a su proyecto de sucesión.
EMILIANO RAMOS, PUNTO DE QUIEBRE DE LA ALIANZA PAN-PRD-GOBIERNO
Emiliano Ramos Hernández está acostumbrado a pelear por las posiciones que ha obtenido en el PRD. Junto con su padre, Salvador, su hermano Alejandro y su cuñado Rafael Quintanar, han conformado un `clan´ con influencia en ese partido en el estado.
Sin embargo, nunca quisieron entender que su añadidura al proyecto del actual gobernador, Carlos Joaquín González, no tendría por qué regirse bajo las reglas del juego del PRD.
Es algo más amplio y complejo.
Actualmente la situación no es ni siquiera similar a las que se dio durante la campaña, cuando Carlos Joaquín era candidato.
Coparon tanto perredistas como panistas un enorme espacio en el espectro del poder con las candidaturas que alcanzaron.
Pero hoy las cosas son distintas. Carlos Joaquín es gobernador, y su capacidad de negociación e influencia están más allá de una pequeña tribu, por vitriólica y africanizada que esté.
No es difícil prever que el `clan´ Ramos, con todo y su organización política, van a formarse en la fila de MORENA, pronto. @AntonioCallejo
