Desde aquel lejano 1994 en que el mundo entero conoció a Jennifer Aniston como Rachel Green en ‘Friends’, hemos admirado su pasión y disciplina por mantenerse saludable a través del ejercicio y la alimentación sin importar su edad.
La actriz de 55 años es la prueba definitiva de que cuando integras el cuidado de tu salud a tu estilo de vida por amor propio, se vuelve parte de ti. Aunque, como todo en la vida, es cansado y no siempre se tiene la energía para hacerlo, pero esta siempre vuelve para retomar el paso.
En honor a que está por cumplir un año más vida, hemos enlistado sus favoritos del ejercicio. ¿Te gustaría saber cuáles son? Keep reading!
La rutina fitness de Jenner Aniston
A Rachel Green le gustaba hacer pilates, pero Jen prefiere el entrenamiento funcional. ¿Por qué? Pues verás, este tipo de ejercicio se enfoca en fortalecer el cuerpo de manera integral con movimientos similares a los cotidianos (levantarse, agacharse, cargar, caminar, subir escaleras) para vivir mejor. Si bien todos los frentes se cubren, desde la fuerza hasta la resistencia, prioriza lo primero.
Los entrenamientos para las mujeres normalmente están enfocados en hacer más cardio y usar poco peso para conseguir una figura estilizada. Sin embargo, múltiples estudios han comprobado que aumentar del trabajo de fuerza y reducir el tiempo de resistencia es más beneficioso, pues genera menos cortisol (la hormona del estrés), aporta más energía y ayuda a controlar los desajustes hormonales.
Jen ha comprobado y compartido que esto es especialmente útil durante la menopausia, y desde que se volvió embajadora de Pvolve, un estudio de entrenamiento funcional, ha compartido sus ejercicios favoritos que incluyen mountain climbers, elevaciones laterales de piernas, push ups, planchas laterales, bicicletas, sentadillas rusas, y muchos más.
También ha mostrado los accesorios fitness que usa con frecuencia, como las pesas para muñecas, mancuernas, reformer pilates, deslizadores, y ligas. Fun fact: sus sesiones duran de 20 a 40 minutos.
Jennifer Aniston ha contado en varias ocasiones que cuando era más joven solía llevar un régimen de ejercicio estricto, pero conforme ha crecido se ha dado cuenta que eso, lejos de hacerla feliz, le generaba más estrés. Entonces, decidió que entrenaría con más compasión, escuchando a su cuerpo y dándole lo que necesita cada día. Por ello, es constante, pero suele tomar descansos y ajustar sus sesiones de entrenamiento según la energía, la salud y el ánimo que tenga sin culparse ni castigarse después.
FUENTE: GLAMUR