Ann-Katrin Berger brilla con la selección femenil de Alemania, y lo hace solo unos años después de vencer el cáncer de tiroides dos veces. Una historia de vida, de lucha y de resiliencia como para inspirar a cualquiera.
Ann-Katrin Berger, la portera de Alemania a la que el cáncer no pudo derrotar
Berger nació en 1990 y desde niña supo que quería jugar futbol. Su carrera comenzó por allá del 2010 en el Sindelfingen de su natal Alemania, para luego pasar al Turbine Potsdam.
Llegó al París Saint-Germain en 2014 y pasó dos años en el club francés. Después fichó por el Birmingham City y ahí enfrentó su primer diagnóstico de cancer de tiroides, en 2017.
Tuvo que dejar el futbol temporalmente, pero regresó a principios de 2018 con su club y vimos a partir de ese momento una mejor versión de Ann-Katrin Berger, una que la llevó a ser refuerzo del poderoso Chelsea Femenino.
Del cáncer en la Euro femenil 2022, a brillar en la Eurocopa Femenina 2025
Siendo jugadora de las Blues, fue convocada por Alemania para ser una de las tres porteras en la Euro Femenil 2022. Y a solo unos días de jugar la final, se entertó de que otra vez tenía cáncer de tiroides. No le contó a sus compañeras para que se concentraran en el partido, mismo que tristemtente para ella y su país, perdieron ante Inglaterra.
Ann-Katrin Berger dejó nuevamente el futbol de forma temporal tras el torneo, pero en una nueva muestra de una fortaleza inquebrantable, volvió a derrotar al cáncer y regresó a las canchas.
Y nuevamente lo hizo con una versión todavía mejor, pues para los Juegos Olímpicos de París 2024 ya era titular con Alemania y fue clave para conseguir la medalla de bronce, primero en cuartos de final atajando dos penales y metiendo uno en la tanda decisiva, y luego deteniendo otro penal en el partido por el tercer lugar contra España.
Mantuvo esa titularidad para la Eurocopa Femenina 2025, donde fue duramente criticada por su mal desempeño en el juego contra Suecia en fase de grupos; pero se levantó de eso y fue la heroína de Alemania en cuartos de final ante Francia, con tres atajadas brutales en los 90 minutos y el tiempo extra, y luego atajando dos penales en la tanda que determinó a la semifinalista.
“Un cuento de hadas tiene lugar en la imaginación. Pero la medalla está colgada delante de mi televisor, así que ocurrió de verdad. Es posible que ocurran cosas así, aunque parezcan increíblemente irreales. No es un cuento de hadas, es una bonita historia con final feliz”, dijo a Sport Bild tras ganar la medalla olímpica, según cita Olympics.