A seguir la estela de Max Verstappen y no dejar que desaparezca. Esa ha sido la misión de Checo Pérez durante las primeras seis carreras de la temporada 2024, la cual ha sido calificada por el propio Helmut Marko, asesor de Red Bull, como “su mejor temporada desde que está con nosotros (2021)”.
Palabras que no deben ser tomadas a la ligera al venir del austriaco, quien no se muerde la lengua, ni mide impacto de sus palabras cuando el piloto número 11 se equivoca en la pista o se encuentra lejos de Verstappen.
Es una realidad que Max Verstappen ha dominado con puño de hierro las últimas dos temporadas y ha dado poco margen de victorias al resto de los pilotos. También, es una realidad que, durante 2023, Checo sumaba dos triunfos durante las primeras seis carreras y dos segundos lugares, por lo que llegó a ilusionarse con ser campeón mundial, un pensamiento que fue derrumbado por el neerlandés al apoderarse del campeonato y no darle nada a su compañero.
Con estos antecedentes ¿por qué Red Bull celebra lo que está haciendo Checo Pérez en 2024?
Es una realidad que Sergio Pérez sería feliz si ve la bandera de México en lo más alto del podio, pero en el garaje se dan por satisfechos que Max no esté arrasando en pista y deje a su compañero a más de medio minuto por detrás, algo que se llegó a convertir en una constante durante el 2023, además de superarlo en clasificación por medio segundo, una ventana que permitía a otros meterse entre ellos y relegar al tapatío a la segunda, tercera o hasta cuarta fila.
Durante gran parte del 2023 Checo Pérez no tuvo en sus manos el auto, toda la situación se le fue de las manos. El propio piloto reconoció que para 2024 tuvieron que dar un paso… o quizá dos hacia atrás para comprender mejor el auto y dejaron de adelantarse a los pronósticos o puestas a punto para dar pasos cortos, pero firmes, y entender qué es lo que mejor le sirve en sus fines de semana.
Bahréin
Red Bull comenzó fuerte la temporada, con Max Verstappen en la pole position y Checo Pérez saliendo quinto en carrera. Las cosas para el equipo y el propio Pérez salieron de gran forma, con el primer 1-2 de la temporada, Checo remontó desde tercera fila y más allá de la diferencia de 22 segundos, dejó buenas sensaciones. “La carrera perfecta para el equipo”, evaluó el jefe de Red Bull, Christian Horner. En tanto, el de Guadalajara señaló ante los medios: “Me siento cómodo con el auto, tengo un gran paquete”.
Arabia Saudita
Mientras que en el paddock Red Bull vivió una guerra civil (por la situación de Christian Horner), en pista Checo Pérez volvió a anotar un nuevo 1-2. Checo mejoró, inició desde el tercer cajón y Charles Leclerc fue el único obstáculo que tuvo que superar para ir a buscar a Max Verstappen. Leclerc y una una penalización de cinco segundos que no le fue informada oportunamente por Hugh Bird, su ingeniero de carrera. Checo se molestó y pisó a fondo para dejar al monegasco con más de 5.5 segundos de diferencia por detrás de él y sellar la segunda posición de carrera.
Australia
Ha sido la peor carrera de Checo en la presente temporada. Primero, afectado por una sanción de tres posiciones en la parrilla de salida por «obstaculizar innecesariamente» en clasificación a Nico Hulkenberg. Nuevamente su ingeniero Bird fue señalado como responsable, pues no le señaló que el alemán se acercaba. Esto provocó que los comisarios aplicaran el castigo. La afición enardeció en redes sociales, ya que los comisarios no han sido parejos al momento de aplicar el reglamento y la nacionalidad de los pasaportes ha sido señalado también por pilotos de peso como Fernando Alonso.
El domingo, las cosas no mejoraron en Melbourne. El auto parecía empeorar con el pasar de la carrera, los cambios de neumático y las puestas a punto ordenadas desde el box alejaban al mexicano de los primeros puestos. Al final, fue un rescate de puntos para Red Bull. Checo quinto lugar, Max sufrió un abandono por problemas con el monplaza y Horner ofreció disculpas al propio Pérez por lo vivido en carrera.
Japón
Luego del trago amargo en Australia el equipo de la bebida energética se refugió en Suzuka, casa de su motorista Honda y donde han dominado en los últimos años. Sergio Pérez volvió a sonreír. Volvió a salir desde la primera fila de salida y dejó sin posibilidades al resto de sus perseguidores. A esto se sumó la apuesta de Pérez con Christian Horner: el piloto le aseguró que calificaría en segundo lugar o primero.
Ya el domingo en carrera, voló sobre la curva 130R al momento de rebasar a los Mercedes y entregó el tercer 1-2 para el equipo en su visita a Japón. Un fin de semana redondo para todos.
China
El regreso de la Fórmula 1 a China trajo consigo grandes maniobras del mexicano, pero del lado de su cajón se pudo ver la luz y sombra. Durante la Sprint del sábado ejecutó una gran maniobra sobre Carlos Sainz y Fernando Alonso con un doble rebase en la vuelta 16 que le entregó la tercera posición.
El domingo de carrera llego tercero, pero pudo ser segundo. Sin embargo, nuevamente los ingenieros tuvieron un mal momento. Checo marchaba en la segunda posición cuando salió un safety car en la vuelta 26, el mexicano perdió dos posiciones y se metió en el tráfico con Fernando Alonso y Charles Leclerc, y viendo cómo Lando Norris se adjudicaba la segunda posición.
Checo no falló ese domingo, fueron los ingenieros y el propio Horner lo aceptó: “Cuando salió el coche de seguridad, fue justo en el momento equivocado (para Red Bull), y tuvimos que cambiar la estrategia para la segunda mitad de la carrera, lo que le costó a Checo posición en la pista, por lo que cayó detrás de Lando y Charles”.
Red Bull perdió la posibilidad de un nuevo 1-2, mientras que Sergio Pérez no se calló y expresó que como equipo “dimos un paso atrás. El equipo no supo interpretar las condiciones”.
Checo se alejó, por primera vez en la temporada, más de medio minuto de Max Verstapen, pero con una estrategia equivocada y su RB20 corriendo seis décimas más lento que el de su compañero solo tenía para pelear por un tercer puesto. Al final fueron 15 puntos que le ayudan en el campeonato, pero sí representaron un trago más agrio que dulce.
Miami
El Gran Premio de Miami volvió a ser una pesadilla para todo Red Bull, no solo fue Checo Pérez, sino también Max Verstappen. Si al piloto estrella le va mal, es raro que a su escudero le vaya bien. Ambos caminaron por la misma senda y se vieron superados por McLaren y Ferrari.
Checo ha sufrido históricamente en el arranque; le cuestan y esto ha sido aprovechado muchas ocasiones por sus rivales. El sábado fue Daniel Ricciardo quien lo desplazó a la cuarta posición al inicio de la Sprint, pero el tapatío tardó solo cinco vueltas para superarlo y fue a buscar a Charles Leclerc, quien no tuvo errores y se fue alejando del piloto de Red Bull. Checo sumó un buen tercer lugar el sábado, pero el verdadero reto llegó el domingo.
Checo Pérez comenzó desde el cuarto cajón y buscó ser agresivo desde el inicio de carrera con una acción que tenía una buena intención, pero la ejecución fue mala, ya que partió desde el lado sucio de la pista y al momento de frenar para la primera curva se salvó por milímetros de estrellarse con su compañero de equipo, Max Verstappen, y con Carlos Sainz. Checo perdió una posición al quedar por detrás de Oscar Piastri, quien ganó dos puestos. Fue el inicio de una carrera que fue cuesta arriba.
Checo tuvo un pésimo rendimiento con los neumáticos medios, los cuales usó al inicio y final de la carrera; se vieron afectados por el safety car que le entregó el triunfo a Lando Norris y, a pesar de buscar la tercera posición de Leclerc, jamás pudieron bajar de la diferencia de medio segundo y se resignó a un triste cuarto puesto.
En estas primeras seis carreras Checo Pérez ha sido aplaudido al interior del equipo y dio pasos para una renovación, pero también la organización ha fallado, al menos, en dos carreras. Esto los ha llevado perderse un segundo lugar y en Miami también dejaron ir un podio.
Para Checo Pérez aún quedan tres cuartos del campeonato, en el cual deberá seguir el rebufo que deja Max Verstappen y tratar de mantenerse aferrado con uñas y dientes para lograr más 1-2 y quizá, si Max lo permite, pueda obtener un triunfo durante la temporada.
FUENTE:ESPN
