Si te suele costar despertarte y sueles entrar tarde al trabajo, tranquilo: no te pasa nada, es el mundo el que está mal. Al menos eso es lo que dice un experto británico en sueño que defiende que todos deberías dormir un poco más y retrasar la hora de entrada.
Paul Kelley, de la Unidad del Sueño del Hospital Universitario de Oxford afirma que la sociedad está machacando nuestra naturaleza, que es más bien vaga, obligándonos a madrugar, cuando es algo que no es sano. Vamos, que lo de que ‘a quien madruga, dios le ayuda’ es solo una frase alienante que carece de verdad.
“Somos una sociedad formada por personas que tienen siempre sueño. Sobre todo, el grupo de edad que va de los 12 a los 24 años. Esto es una seria amenaza para la salud, el estado de ánimo y la estabilidad psicológica”, defiende el experto en una entrevista concedida a The Guardian.
Kelley ha llegado a esta conclusión tras analizar el sueño y el desempeño de los alumnos de 100 colegios de Reino Unido que han participado en un experimento que consistía en entrar a clase un poco más tarde que el resto de los chavales. Tras ver los datos, descubrió que los chicos podían llegar a dormir hasta 10 horas más a la semana y rendir mejor en sus tareas habituales.
Para él, la mejor hora de entrada es las 8:30 para niños de entre 8 y 10 años, 10 de la mañana para los que tienen 16 años y 11 para aquellos que tienen 18 años. Y lo justifica así: “A los 10 años, te levantas y vas a clase como si fueras al trabajo, de 9 a 5 de la tarde. Esto también sirve y es sano cuando se tiene 55 años. Pero entre esas dos edades, se producen cambios tanto sociales como biológicos, por lo que hay que hacer ajustes de hasta 3 horas para que el cambio sea natural y podamos rendir igual”.
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Según Kelley, durante buena parte de nuestra vida adulta nos obligamos a despertarnos mucho antes de lo que realmente necesitamos, que sería dormir aproximadamente hasta las 10 de a mañana todos los días. Es decir, todos los que se levanten a las 6 estarán privando a su cuerpo de nada más y nada menos que 4 horas de sueño, con los consiguientes problemas de salud que puede originar esta situación. Para el experto, nadie debería entrar a trabajar antes de las 10 de la mañana, y lo recomendable es que la hora oficial fuera las 11 de la mañana.
Los beneficios de dormir las suficientes horas repercuten en nuestro desempeño cognitivo -más atención, memoria y mejor capacidad de concentración- y previenen enfermedades como el Alzheimer.
Fuente: Sipse