Un grupo de investigadores de la Escuela Politécnica Federal de Zúrich (ETH Zúrich), con ayuda de una startup estadounidense llamada Inkbit han logrado imprimir una mano robótica conformada por huesos, ligamentos y tendones, representando un hito dentro del campo de la impresión 3D. Esto ya que logra combinar materiales rígidos y flexibles, hechos con polímeros distintos.
Anteriormente, los materiales utilizados par imprimir en 3D habrían hecho imposible que este tipo de proyectos fueran realizables. Pero con los nuevos polímeros de tioleno de curado lento, la mano robótica pudo ser completamente creada.
Un nuevo panorama en la robótica
En palabras de Thomas Ruchner, estudiante de doctorado de la ETH de Zúrich, estos nuevos materiales permiten gran flexibilidad, además de una buena precisión para manipular cosas.
“Ahora utilizamos polímeros de tioleno de curado lento. Tienen muy buenas propiedades elásticas y vuelven a su estado original mucho más rápido después de doblarse que los poliacrilatos. Los robots fabricados con materiales blandos, como la mano que desarrollamos, tienen ventajas sobre los robots convencionales fabricados con metal. Como son blandos, hay menos riesgo de lesiones cuando trabajan con personas y son más adecuados para manipular mercancías frágiles.”
Estos nuevos avances abren camino a una nueva etapa en el desarrollo e investigación en el campo de la robótica. Los materiales utilizados para este nuevo proceso también ayuda a crear herramientas más blandas y menos peligrosas al contacto humano. Por lo que aseguran una mejor convivencia entre artefactos y personas.
Pero no solo el campo de la robótica y prótesis se podría ver beneficiado de estos avances, también el de la maquinaria pesada o incluso el de embalaje, ya que una mayor flexibilidad con componentes resistentes otorgan de una mejor movilidad a las herramientas creadas a partir del polímero de tioleno.