El Sindicato de Trabajadores de la Universidad Autónoma de Quintana Roo solicitó realizar una auditoría a las finanzas administradas por el ex rector Francisco López Mena, debido a que “no aparecen” los recursos que destinó la Secretaría de Educación Pública (SEP) para el aumento salarial de los docentes y personal administrativo.
Mario Vargas Paredes, secretario general del Sindicato de Trabajadores Académicos y Administrativos de la UQROO, explicó que tienen sospechas de que este dinero -cuya cantidad se desconoce pero ascendería a varios millones de pesos- fue retenido de manera presuntamente irregular:
“Ahora estamos en una investigación profunda para solventar estas acusaciones, y en caso de encontrarse irregularidades que se sancione a los responsables de que durante varios años, los sueldos de los trabajadores de la Universidad han sido afectados”.
Puntualizó que sus sospechas iniciaron cuando la SEP informó que en el último periodo se transfirió a la rectoría de la UQRR entre un 7% de aumento salarial cada año.
Fue entonces cuando se dieron cuenta que en etapas anteriores se habían depositado cantidades similares, de entre 3.5 a un 7%, pero en su lugar los trabajadores sólo recibían incrementos de 2, 1.5, 0.9 y 0.5 por ciento, dependiendo de su puesto. Declaró el profesor Mario Vargas.
«Lo que queremos saber es que paso con ese dinero extra, porque a nosotros no nos informaron nunca cuánto transfirió la SEP. Por eso independientemente de las investigaciones que iniciamos, es necesario que las autoridades competentes realicen una auditoría exhaustiva a esta administración». Declaró el profesor Mario Vargas.
Aunque no tienen pruebas fehacientes, sospechan que los “moches” a sus aumentos iniciaron desde la administración la rectora Elina Coral, ya que éste siempre ha sido un tema que se ha manejado a discreción por parte de los titulares de la Universidad Autónoma de Quintana Roo.
Cabe destacar que en junio pasado, la Comisión de Huelga del Sindicato de Académicos y Administrativos de la Universidad realizó durante dos semanas paros parciales, ante la falta de respuesta del aún rector Francisco López Mena a la solicitud de aumento salarial de 4%, siendo esta la única casa de estudios en el país que no ha había accedido a este beneficio.
Al final el tema fue resuelto de manera interna.