DESTRIPACUENTOS
Por Antonio Callejo
*Roberto Borge, sí mira al Caribe
El gran esfuerzo que realizan los sectores público y privado en México por impulsar la industria turística en la región, ha mostrado resultados notables. La generación de fuentes de empleo, atracción de inversiones e incremento en la afluencia turística es innegable. Sin embargo, hay una tendencia absolutista por asociar a todos los productos de una investidura de origen “Maya”.
No es un desacierto en ninguna manera. Sin embargo, hay una especie de desdén, quizá inconsciente, o naturalmente empresarial, que está dejando de lado la pertenencia específica de Quintana Roo a la Cuenca del Caribe.
Y el Caribe tiene historia, una muy rica e indispensable en el encuentro con el llamado `Viejo Mundo´. Innegablemente cuenta con una cultura e identidad también particular, lo mismo que su música, gastronomía, arquitectura y un sin fin de particularidades que ya no suelen formar parte de la oferta en la publicidad que se usa como herramienta para atraer turistas a esta zona del país.
Hay una especie de `divorcio´ tácito, o alejamiento en el mejor de los casos, entre México, específicamente de Quintana Roo, y el Caribe.
Quintana Roo ocupa apenas el 2.9 por ciento del total territorio nacional. Es una pequeña porción que, sin embargo, contiene a los principales destinos turísticos de México, por los cuales se generan más de 30 por ciento de los ingresos totales en vía divisas e inversiones extranjeras asociados al turismo. Otro dato interesante, es que esta pequeña porción del país es la única que tiene frontera con dos países (Belice y Guatemala).
Y es la única región de México que tiene vista al Mar Caribe, donde forma parte de la Cuenca caribeña y sus reconocidos 23 países y 11 dependencias o protectorados. A Cancún se le cuenta en la historia de la geografía moderna, junto a las 17 ciudades caribeñas más pobladas, entre Caracas, Santo Domingo, San Juan, Puerto Príncipe, Maracaibo, La Habana, Barranquilla, entre otras.
El Caribe es por sí solo una enorme fuente de riqueza natural, cultural e histórica.
Tiene una historia precolombina y una historia de la Colonia sin la que es imposible entender a todo el Continente Americano. Sin embargo, por diversas razones, el `Caribe Mexicano´ es actualmente solo una marca registrada para fines turísticos, que no añade contenidos específicos relacionados con esta región del planeta.
Hasta ahora, y con especial énfasis desde el año 2012, el `Año de la cultura Maya´, se ha venido imprimiendo un sello uniformemente `mayista´ a todo lo que tiene que ver con el turismo en Quintana Roo. Se entiende la medida como una respuesta a la demanda de los mercados, que se volcaron interesados en el pasado milenario y la herencia de esta cultura, que tuvo presencia en el Sureste mexicano y en al menos otros cinco países de Centroamérica: Guatemala, Honduras, Nicaragua, Salvador y Belice.
Desde entonces se alineó la política de promoción turística a este interés y surgió, como un gran producto, la llamada “Gran Península Maya”. Primero con los esfuerzos de las propias oficinas de promoción turística. Darío Flota, del Fideicomiso de Promoción de la Riviera Maya, unió esfuerzos con sus pares de Yucatán y Campeche, y desde hace varios años impulsaron un circuito en la Península que actualmente se agenció Miguel Quintana Pali, de Experiencias Xcaret, para promover sus intereses en los tres estados de esta zona. Campeche, Yucatán y Quintana Roo. Sin embargo, su gran proyecto dejó al Caribe de lado.
El Caribe, esta zona a donde llegó Cristóbal Colón y luego Hernán Cortés, hicieron de esta región y sus principales islas, base y centro neurálgico de la operación que culminó en el dominio de la mayor parte del Continente.
No se entendería a esta América moderna sin aquellos primeros seis cerdos que llegaron a bordo de las naves de Cortés y que desembarcaron por primera vez en Cozumel, por poner un ejemplo minúsculo.
Sin embargo, la música que se escucha en el mundo entero no sería posible sin la llegada de los tambores africanos al Caribe, durante la trata esclavista. El son cubano es primo-hermano del son veracruzano y pasó por aquí, por el Caribe Mexicano, para convertirse en lo que es hoy. En la `Salsa´, que brilló y se potenció en Nueva York en los años setenta.
Diversos estudios académicos han encontrado que el `Caribe´, no es únicamente la región de la Cuenca donde convergen estos países y sus islas y cayos. Es `Caribe´ todo lo que surgió del encuentro entre el `Viejo Continente´ y esta zona. La música que se escucha en todos los confines de planeta. Los puros que se fuman en Inglaterra son tan caribeños como el ritmo de `Punta Rock´ que se escucha en Belice y Chetumal, y tanto como las casas sobre pilotes de madera también chetumaleños.
En Felipe Carrillo Puerto, un municipio que ni siquiera está considerado dentro de la marca `Caribe Mexicano´, hay un intenso movimiento cultural que fusionó el caribeño y jamaicano `reggeae´, con el idioma maya. Hay varios agrupaciones musicales, entre las más destacadas “Chan Santa Root´s”, que producen música caribeña con letras en maya. Son invitados a diversos festivales de cultura del Caribe dentro y fuera del país, y escasamente reconocidos aquí en Quintana Roo.
Un esfuerzo importante es el que hizo el gobierno del estado, encabezado por Roberto Borge Angulo, de devolverle el Festival de Cultura del Caribe a Quintana Roo.
Sin embargo, falta todavía un nuevo enfoque que no pierda la brújula en este sentido. El Caribe Mexicano tiene mucho qué ofrecer. En gastronomía sólo basta asomarse a una ruta de cebiches maravillosos, todos con un toque distinto, desde Isla Mujeres y hasta Chetumal. Si hay un Caribe mexicano es precisamente el Caribe Maya, en el que poco o casi nada se ha reparado.
Borge Angulo, va por el Caribe
El gobernador de Quintana Roo y presidente de la Comisión de Turismo de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), Roberto Borge Angulo, visitó Colombia, cuyas ciudades costeñas miran al Caribe, al frente de la delegación del principal destino turístico de México y América Latina, para participar en la 34a. edición de la Vitrina Turística que organiza la Asociación Colombiana de Agencias de Viajes y Turismo (Anato), el evento más importante de turismo en Colombia y uno de los más relevantes de Latinoamérica. @Antoniocallejo