Las células delictivas que operan el tráfico de personas en Cancún han cambiado de métodos para poder internar a indocumentados en este destino turístico, que después son llevados a la frontera con Estados Unidos, a cambio de pagos de varios miles de pesos.Uno de estos cambios ha sido el utilizar hoteles del centro de la ciudad como casas de seguridad, pues ahí hospedan a los indocumentados para después continuar con la travesía, sobre todo de origen centroamericano.
En lo que va de este año han sido asegurados en hoteles de la ciudad más de 40 indocumentados de diferentes nacionalidades.
Desde principios de este año, los grupos delictivos que operan el tráfico de personas de origen extranjero en Cancún comenzaron a utilizar hoteles del centro de la ciudad para albergar a las personas indocumentadas cuyo único propósito es llegar a Estados Unidos.
En marzo de este año, huéspedes del hotel City Express Junior ubicado en la Supermanzana 8, reportaron al número de emergencias 066 sobre la presencia de gente armada y sospechosa en siete habitaciones del hotel, por lo que elementos de la Policía Judicial del Estado (PJE) llegaron al lugar y encontraron a tres cubanos afuera del centro de hospedaje.
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Sospechosamente, el INM tardó más de una hora en acudir al llamado de la PJE, y esto permitió que el resto de cubanos, que se hospedaban en el hotel, pudieran escapar.
En esa ocasión, los cubanos dijeron que salieron de su país por vía aérea hacia Ecuador y llegaron hasta Cancún por vía terrestre.
Al llegar, les indicaron que se dirigieran al hotel “City Express Junior” en donde ya había una habitación reservada para ellos y posteriormente serían llevados -al parecer también por tierra-, hasta la frontera con Estados Unidos.
Después de este aseguramiento, los “polleros” vieron que no era bueno llevar a indocumentados a hoteles de un nivel medio o alto, por lo que optaron por ocupar hoteles más modestos, sobre todo los ubicados en el primer cuadro de la ciudad.
Esto se comprobó en el mes de junio, cuando un grupo de 35 indocumentados, entre ellos seis menores de edad, convirtieron el hotel “Los Cuates de Cancún” en una “casa de seguridad”.
El hotel en mención se ubica en la céntrica avenida José López Portillo en la Supermanzana 64, a unos cuantos metros del Parque del Crucero.
En el lugar fueron encontradas 7 mujeres mayores de edad, dos niñas, 22 hombres y 4 niños, todos con buen estado de salud.
Tres meses después, el pasado lunes fueron asegurados seis hombres de origen hondureño, quienes se hospedaban en el hotel Kamna, ubicado en el primer cuadro de la ciudad, en la Supermanzana 23.
Los hondureños fueron certificados médicamente, y después quedaron a disposición del Instituto Nacional de Migración (INM).
A diferencia de los cubanos, los centroamericanos pagan una cantidad menor a los traficantes de personas, para poder llegar a la frontera con Estados Unidos.
Llegan a Cancún por vía terrestre, entrando por la zona sur del estado y aquí permanecen unos días, en lo que son llevados hacia el norte del país.
A algunos, les consiguen licencias de conducir falsas o incluso credenciales de elector, las cuales utilizan para identificarse y poder abordar un vuelo en el aeropuerto de esta ciudad.
Los que corren con suerte logran pasar desapercibidos y abordan sus vuelos normalmente, llegando así hasta su destino final.
Otros se han quedado en el camino, al ser detenidos en el aeropuerto, como ocurrió con dos parejas de origen salvadoreño y hondureño, que fueron detenidas la semana pasada por elementos de la Policía Federal.
Fuente: Por esto