Madres quintanarroenses se encuentran entre los primeros indicadores de violencia doméstica, estrés laboral y enfermedades prevenibles a nivel nacional, revelan estudios del Semáforo Delictivo, la Secretaría de Salud federal y la Secretaría del Trabajo y Prevención Social (STPS), donde la falta de atención a su propia salud, por poner encima a la de su familia, las deja vulnerables a padecimientos crónico-degenerativos.
Se estima que de las 349 mil mujeres mayores de edad que habitan en Quintana Roo, según datos del Consejo Estatal de Población (Coespo), al menos 100 mil son madres de familia, de estas casi la mitad participa de manera activa en el campo laboral, con el objetivo de apoyar al sustento del hogar y al menos 30 mil son cabeza de familia.
Enoel Pérez Cortes, delegado de la STPS, señaló que las mujeres casadas son el sector con mayor incidencia de explotación y acoso laboral, donde se estima que seis de cada 10 madres trabajadoras han sufrido alguno de estos delitos, pero solo una de cada 10 denuncia. El temor por perder el empleo y que sus parejas no las dejen trabajar, es lo que hace que callen.
Rubén Maldonado Villanueva, director del Hospital General ‘Jesús Kumate Rodríguez’, señaló que las mujeres adultas en Cancún padecen de enfermedades crónicas-degenerativas, como es hipertensión, sobre peso, estrés severo y padecimientos casi exclusivos del género, como es el cáncer de mama, tercera causa de muerte entre mujeres mayores de 40 años en México.
A esto se suma que mujeres madre de familia son uno de los sectores más abandonados en el sector salud, pues solo acuden al médico cuando tienen padecimientos severos.