CANCÚN, Q. ROO.- En Quintana Roo las 3 mil 031 personas que permanecen privadas de la libertad pueden comunicarse con sus familiares a través de videollamadas durante la contingencia sanitaria por Covid-19.
El equipo para llevar a cabo las videollamadas está siendo habilitado en los centros penitenciarios, tras la suspensión de visitas como medida preventiva por la pandemia de coronavirus.
A partir del domingo 22 de marzo por instrucciones del secretario de Seguridad Pública, Alberto Capella Ibarra, se suspendieron las visitas en los centros penitenciarios de Cancún, Chetumal y Cozumel para evitar alguna complicación derivado de la epidemia.
Ante esta circunstancia, con el apoyo y asesoría técnica del personal del C4, se está utilizando la tecnología para que tengan este reconfortante acercamiento con sus seres queridos, aunque sea de manera virtual, y para ello hay 10 equipos disponibles en la cárcel de Cancún, otros 10 más en Chetumal y 5 en Cozumel.
En la cárcel de Cancún, la gente que cumple una sanción y que quiera platicar con sus familiares debe anotarse en una lista para que el área de Trabajo Social notifique la persona con la que vaya a hacer contacto y durante 20 minutos podrán mantener esta comunicación, explicó Miguel Ángel Matamoros Espinosa, director de este centro de reinserción.
“A través de una aplicación que se puede descargar en cualquier teléfono celular vamos a lograr hacer la conexión con los chicos aquí en el establecimiento penitenciario. Es una aplicación que se llama Videoconferencia Telmex, se van a crear unos usuarios donde la familia los tendrá. Nosotros vamos a proporcionar los usuarios”.
Los horarios y los días dependerán de la demanda que exista por parte de las personas privadas de la libertad para organizar bien y todos tengan acceso a un equipo, y el personal penitenciario resolverá las dudas desde cómo descargar la aplicación, hasta cómo ingresar.
Lucio Hernández Gutiérrez, subsecretario de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad, agradeció la colaboración y sensibilización de los familiares de la gente interna, pues comprendieron que la suspensión de la visita obedece a acciones preventivas.
“Esperemos que este proceso sea lo más corto posible para poder reintegrarnos al desarrollo de la vida normal, tanto de las personas que se encuentran en estado de reclusión, como la visita familiar”.
FUENTE: Luces Del Siglo