CANCÚN.- Inseguridad y olvido es lo que vive hoy en día la Avenida Yaxchilán, la cual fuera una de las zonas emblemáticas donde se reunían los cancunenses para convivir una vez concluido su trabajo, ya sea en el restaurante o el bar, para comer o para cantar.
En menos de 5 años la Avenida Yaxchilán se ha convertido en un sitio desolador y abandonado, donde la mayoría de los locales comerciales que antes estaban llenos hoy se encuentran cerrados y muchos de ellos destruidos, siendo nido de animales y delincuentes, incluso, sirviendo de baños para muchos o de basurero para otros.
Son muy pocos los establecimientos que “siguen con vida” en la zona, son contados los que han podido mantenerse de pie y que si bien continúan siendo visitado, no se compara con el flujo de comensales que hasta hace 5 años o un poco más mantenían a la zona aún vibrante.
La zona que antes “brillaba” por tener los sitios de moda para un sector de la sociedad, se fue acabando, si bien por los traspies de la economía que llevaron a los empresarios a no poder solventar los gastos, mucho tiene que ver también la ola de inseguridad que ha permeado de un tiempo hacia acá, lo cual va desde robos y asaltos hasta extorsiones por cobros de derecho de piso por parte de grupos delincuenciales, que han llevado a la quiebra y cierre de cortinas de la mayoría de los locales, dado que primero está la integridad antes de la exposición a una muerte segura.
Cabe destacar que esta avenida era también visitada por el turismo sobre todo por quienes se hospedaban en zonas del centro y buscaban pasar un rato ameno, y a quienes hoy ya no se les ve pasear ante el temor de lo que pueda ocurrirles, por lo que tanto este segmento como los locales, han tenido que migrar a otros sitios o simplemente buscar otra forma de divertirse o dirigirse a otro lugar donde cenar, dado que son contados los establecimientos que aún pueden ofrecer algún atractivo.
Hoy se encuentra al bordo de la quiebra, reina el abandono y emergen pequeños locales dedicados a otras actividades, donde incluso ha sido “zona de guerra” entre narcomenudistas o presuntos delincuentes que buscan el control de la plaza o que, como ocurrió semanas atrás con un joven al que apuñalaron, aparentemente sin motivo y le quitaron la vida, buscando así ualquier motivo para pelear y sacar sus más grandes frustraciones, haciendo de la zona un sitio por demás peligroso, no importa el género o la edad, solo inseguro.
Pero ¿y las autoridades?, si bien los gobiernos municipales que han pasado o se encuentran en el cargo han señalado el interés de “reavivar” esta zona, la realidad es que no hay un proyecto aterrizado y en pie que se pueda ver y poco a poco se está decayendo.
Hoy en día tanto ciudadanos como empresarios buscan la reactivación de este espacio de convivencia, por lo que se requiere de un plan integral que brinde tanto una nuvea cara como seguridad total para hacer de esta zona no solo lo que era antes sino un lugar de opción para que el turista del centro pueda visitar y promover.
En manos de las autoridades está que este sitio emblemático “reviva”.
FUENTE: Marcrix.