Gran ironía se tiene ante la existencia de la vaquita marina, pues se puede extinguir sin que nadie haya logrado tomarle una buena foto vivo o grabarlo bajo el agua. De hecho, el mejor ‘retrato’ disponible de la marsopa mexicana ni siquiera es uno real, sino una pintura acrílica realista hecha por el artista William Shepard, quien nunca ha visto al animal más que por una imagen.
La obra artística le fue comisionada por Patricio Robles Gil, fotógrafo mexicano que dedica su vida también a la protección de especies, quien quería lanzar una campaña de rescate para concientizar sobre la delicada situación de la vaquita, pero no había una buena foto para enseñar nada de esta especie mexicana. Las pocas que hay son de animales muertos o solo de sus aletas saliendo del agua.
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¿POR QUÉ ES TAN DIFÍCIL FOTOGRAFIARLA?
La respuesta es simple: porque se están extinguiendo, son muy pequeñas, evasivas y tímidas. Normalmente se requiere tecnología acústica para identificar mediante sonidos dónde están. El gobierno mexicano también está involucrado con esta lucha, pero los especialistas también quieren incluir en la iniciativa a las autoridades y consumidores estadounidenses.