Su servicio a la comunidad y los rescates de personas en siniestros llevan más de ocho años, sin embargo, el sismo del 19 de septiembre del año pasado hizo que todo México conociera a una verdadera heroína de carne, hueso y cuatro patas.
Ya sean reconocimientos, estatuas o simplemente admiración por sus proezas, Frida es la perra de raza labrador que se ganó el respeto y además de convertirse en icono de la solidaridad, ayudó a generar una cultura por el cuidado de los perros.
«Han habido labores altruistas, se ha notado más que la gente adopte perritos, esa es una labor muy noble. Eso fue el detonante de Frida y sus compañeros caninos», dice Israel Arauz, tercer maestre de infantería de la Secretaría de Marina y entrenador de Frida.
«El contacto con los niños es muy importante para también formar una cultura de cuidado hacia los perritos y de Protección Civil. Que a temprana edad se nos inculque qué hacer en un sismo y dónde poderse resguardar».
Arauz también explicó que a raíz del 19 de septiembre de 2017, los mismos voluntarios que tienen a perros de rescate han sido más conscientes para mejorar su capacitación.
Frida, en ese entonces con ocho años de edad, entró en funciones horas después de aquel martes 19 de septiembre de 2017 cuando a las 13:14 horas un sismo de magnitud 7.1 azotó al centro del paísy causó graves estragos en la Ciudad de México. También colaboró en el terremoto de magnitud 8.2 con epicentro en el golfo de Tehuantepec que dejó daños irreversibles en Oaxaca y Chiapas una semana antes.
Hoy a sus nueve años, esta heroína que no usa capa, pero sí un chaleco de la Marina, zapatos azules y lentes para proteger su vista, sigue en funciones y solo los altos mandos podrían retirarla.
«Frida sigue siendo un perrito operativo. Tiene nueve años y es decisión del alto mando en qué momento tendría que retirarla del servicio, sin embargo, ya retirada podría permanecer en la institución».
Por otro lado, José García Arellano, teniente de navío y médico veterinario zootecnista, titular del Centro de Reproducción y Adiestramiento Canino en la Semar, explicó la manera en que los perros obtienen los conocimientos como los que posee Frida.
«Tenemos diferentes fases de trabajo, dadas por la edad de nuestros perros. Trabajamos con ellos desde que nacen y desde ese momento se da la interacción entre los cachorros y la persona que está al pendiente de ellos».
La socialización, el entrenamiento y hasta la selección para las diferentes tareas que cada uno de los caninos hará, son las actividades que se realizan en este centro de reproducción de la Armada de México.
ROCY, EL MACHO ALFA Y SUS CINCO COMPAÑERAS
Aunque Frida es labrador, en la Unidad Canina de la Armada de México se especializan en una raza que ayude en las tareas de rescate en todo el país. Rocky, un Belga Malinois, especie traída de Holanda, es el macho y semental que junto a cinco hembras producen a los que ojalá no tengan que ser héroes del país.
“Estamos trabajando con él de 2015 a la fecha, es un perro seleccionado, de línea holandesa y estamos buscando un mejoramiento genético y una selección acorde a nuestras necesidades”, detalló García Arellano.
FUENTE: MEDIO TIEMP O