Redacción Macronews.— Este miércoles por la mañana, la Cámara de Diputados, con el respaldo de Morena, el PT y el PVEM, aprobó en lo general y en lo particular la polémica reforma judicial impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador. El proyecto de ley plantea cambios radicales en la estructura del Poder Judicial, entre los que destacan la elección por voto popular de jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte a partir de 2025. Tras su aprobación en la Cámara baja, la reforma ahora será debatida en el Senado de la República.
Principales puntos de la reforma judicial
Uno de los elementos más controversiales de esta reforma es la elección popular de más de 1.600 cargos judiciales. Esto incluirá a ministros de la Suprema Corte, consejeros del Consejo de la Judicatura Federal, magistrados del Tribunal Electoral Federal, magistrados de circuito y jueces de distrito. Las elecciones se organizarán en dos fases: en 2025 se elegirá a los ministros de la Suprema Corte, a los magistrados del nuevo Tribunal de Disciplina Judicial, a la mitad de los jueces de distrito y magistrados de circuito; en 2027, se votará por la otra mitad. Estos comicios serán coordinados por el Instituto Nacional Electoral (INE).
Otro cambio importante es la reducción del número de ministros en la Suprema Corte, que pasará de 11 a 9. Los ministros electos ocuparán sus cargos por periodos de 8, 11 o 14 años, dependiendo del número de votos obtenidos. Además, la presidencia de la Corte será rotativa, renovándose cada dos años según los resultados de la votación.
Para los jueces y magistrados, el proyecto plantea un periodo de nueve años en el cargo, con la posibilidad de reelección. Los aspirantes deberán cumplir con estrictos requisitos, como poseer un título en Derecho con un promedio superior a 8, tener al menos cinco años de experiencia jurídica y presentar cartas de recomendación.
El camino hacia la aprobación
El siguiente paso en el proceso legislativo es el debate en el Senado de la República, donde la reforma enfrentará nuevos análisis y discusiones. A partir de 2025, se espera que comience la implementación gradual de estos cambios, con la elección de los primeros funcionarios judiciales mediante el voto ciudadano. Para 2027, se culminará el proceso, con la renovación total de las magistraturas y jueces de distrito.
La reforma judicial marca un hito en la reconfiguración del sistema de justicia mexicano, con el objetivo declarado de hacer el Poder Judicial más transparente y accesible para la ciudadanía. Sin embargo, las críticas y el debate sobre sus implicaciones para la independencia judicial continúan.