El reconocido yucateco, Noé Peniche Patrón, durante la inauguración de la fábrica Sisal Tejidos Yucatán, en compañía de su amigo Camilo Campos, entregó al Secretario de Gobernación, Adán Augusto López y al gobernador de esa entidad, Mauricio Vila, su texto: Un Camino Asía el Tren Maya-Historia de los Ferrocarriles en Yucatán. Que en fechas anteriores le había hecho llegar al Presidente de la República, y amigo personal, Andrés Manuel López Obrador.
Noé Peniche Patrón, técnico agrónomo, quién hace 20 años fuese el liquidador de Tanzamex, señaló que la inauguración de la fábrica Sisal Tejidos Yucatán, propiedad del empresario yucateco Femando Ponce García, inicia el resurgimiento de la producción e industrialización del henequén.
Recordó que en la época de Luis Echeverría Álvarez se creó la empresa binacional Tanzamex, durante el proceso de liquidación se pasaron los bienes y pasivos de la compañía al Estado de Yucatán y se encontró que había un pasivo con una empresa Irlanda, especializada en maquinaria denomina James Maqui, quien había surtido parte de los equipos a la binacional.
Sin embargo, cuando se revisaron las líneas de producción, los mexicanos no avalaron las compras de James Maqui, y por indicaciones de la ex gobernadora de ese entonces, lo envían a renegociar esa deuda y con la intervención del Primer Ministro, Julios Neirere se logró aclarar que los mexicanos no tenían ningún pasivo.
De manera paralela el empresario Ponce García al ver que en ese “ir y venir” de toda esa maquinaria se perdería gran parte de todos esos equipos, adquiere y rescata varios telares que hoy representan el renacer de la industria del Henequén en Yucatán.
Con la reactivación de esta planta que llegará a generar más de 500 empleos directos, no sólo se logra la reactivación del cultivo del henequén en la zona que necesita más desarrollo económico y justo ahora que aún se padecen los efectos de la pandemia, sino que permite a toda la cadena productiva tomar revancha en contra de las fibras sintéticas, que hace más de dos décadas desplazaron a la fibra de henequén de los mercados internacionales, al venderse muy por debajo del precio de las naturales y biodegradables, que hoy ante los efectos del cambio climático, el mundo entero ha puesto los ojos y está retomando el uso de esta materia prima.