La explosión de un artefacto explosivo casero este jueves en un restaurante indio en una plaza de Mississauga, ciudad situada a unos 30 kilómetros al oeste de Toronto (Canadá), en la que han resultado heridas al menos 15 personas no parece ser terrorismo, según ha indicado la jefa de la Policía regional de Peel. Tres de los heridos, que en un primer momento se encontraban en estado crítico, han mejorado en las últimas horas, según ha informado la Policía.
La jefa de la Policía Regional de Peel, Jennifer Evans, afirmó este viernes durante una rueda de prensa que «no hay indicios de que sea un atentado terrorista o un crimen de odio» pero que la Policía no ha descartado ninguna hipótesis porque la investigación acaba de empezar.
@Peel_Paramedics have transported 15 pts. from The Bombay Bhel restaurant in Mississauga. 3 pts. were taken to trauma centres with critical blast injuries. pic.twitter.com/Qhd9mX2wV7
— Peel Paramedics (@Peel_Paramedics) 25 de mayo de 2018
El incidente se ha producido en la noche de este jueves alrededor de las 22.32 (hora local) en la zona de la calle Hurontario y la Avenida Eglinton. En el momento del ataque, en el restaurante se estaban celebrando dos fiestas privadas de cumpleaños a la que asistían, entre otros, niños menores de 10 años de edad. Evans afirmó que no hay información si el explosivo estaba dirigido a los asistentes de una de las dos fiestas de cumpleaños.
Los investigadores han facilitado una descripción de los sospechosos y una imagen captada por una cámara de seguridad. La policía estima que miden en torno a 1,80 metros, tienen complexión delgada y llevaban el rostro cubierto. Según la imagen facilitada vestían pantalones vaqueros descoloridos, chaquetas de cremallera oscuras con la capucha puesta, camiseta gris y zapatillas de deporte de color oscuro.
Los paramédicos de Peel han informado de que entre los heridos hay tres personas en estado crítico que han sufrido «lesiones por onda expansiva», según ha recogido la cadena canadiense CBC. Además, dos personas han sido trasladadas al Hospital Sunnybrook.
FUENTE: EL PAIS