7 FACTORES QUE PUEDEN REDUCIR EL APETITO EN LA TERCERA EDAD Y CÓMO AFRONTARLOS: ESPECIALISTA ADVIERTE SOBRE RIESGOS DE DESNUTRICIÓN EN ADULTOS MAYORES
Redacción Macronews
Ciudad de México, 17 de agosto del 2025.– Con el paso de los años, el apetito puede disminuir de manera progresiva o repentina. Para los adultos mayores, esta situación no solo implica un cambio en los hábitos, sino que puede ser un signo de problemas físicos o emocionales que requieren atención médica.
El gastroenterólogo consultor Nick Thompson, presidente de la Asociación Británica de Nutrición Parenteral y Enteral (BAPEN), explicó a The Independent que la pérdida de apetito en la vejez se relaciona con factores como problemas dentales, movilidad reducida, depresión, efectos secundarios de medicamentos, enfermedades crónicas, soledad e incluso estreñimiento.
El especialista señala siete causas principales:
Problemas dentales, que dificultan la masticación.
Movilidad reducida, que limita el acceso a alimentos frescos.
Depresión y salud mental, que disminuyen el interés en cocinar y comer.
Medicamentos, cuyos efectos secundarios pueden alterar el apetito.
Enfermedades crónicas o digestivas, como el sobrecrecimiento bacteriano intestinal (SIBO).
Soledad y aislamiento social, que reducen la motivación para preparar comidas completas.
Estreñimiento, común en la vejez y que afecta la sensación de hambre.
Para contrarrestar estos factores, Thompson recomienda:
Fomentar la alimentación en compañía para recuperar el interés en la comida.
Revisar medicamentos con un médico para reducir efectos secundarios.
Mantener actividad física regular, clave para estimular el apetito.
Mejorar la calidad de la dieta con frutas, verduras y suplementos cuando sea necesario.
“Los motivos que reducen el apetito varían en cada persona. Lo importante es detectar la causa y actuar de manera temprana”, concluyó el especialista.
Esta falta de ingesta puede derivar en desnutrición, pérdida de peso y disminución de energía vital, afectando directamente la calidad de vida.
El especialista recomienda estrategias sencillas para contrarrestar el problema: hacer de la comida un momento social, revisar la medicación bajo supervisión médica, mantener actividad física regular y mejorar la calidad de la dieta con alimentos frescos y ricos en nutrientes.
Detectar a tiempo las causas de la falta de apetito es esencial para evitar complicaciones graves en la salud de los adultos mayores y garantizarles una mejor calidad de vida.