El próximo 22 de agosto llega a los cines ‘Agárralo como puedas’ (2025), de Akiva Schaffer, un reboot con espíritu de secuela generacional que retoma la saga iniciada a finales de los años 80 protagonizada por Leslie Nielsen. La trilogía se convirtieron en un clásico cine paródico y del humor absurdo a lo largo de sus tres cintas: ‘Agárralo como puedas’ (1988), de David Zucker, ‘Agárralo como puedas 2 y 1/2: El aroma del miedo’ (1991), nuevamente dirigida por Zucker, y ‘Agárralo como puedas 33 y 1/3: El insulto final’ (1994), de Peter Segal. Ahora, más de tres décadas después, el nuevo proyecto enmarcado en la franquicia busca conectar con una nueva generación sin perder el tono irreverente de sus originales.
Esta nueva entrega se centra en Frank Drebin Jr., hijo del torpe y emblemático detective interpretado por Nielsen. La trama gira en torno a su intento por limpiar su nombre tras verse envuelto en un complot que amenaza con provocar una crisis internacional. En paralelo, debe demostrar que es más que una sombra de su padre, mientras colabora con Beth, una escritora de novelas criminales que se convierte en su inesperada aliada. La película mantiene el estilo del original: gags absurdos, diálogos punzantes y situaciones imposibles, y aunque es un producto pensado para el presente, la cinta respeta el legado de la saga. Esta vez, Liam Neeson y Pamela Anderson recogen el testigo de Leslie Nielsen y Priscilla Presley, trasladando a la época actual el mismo espíritu de comedia desatada que convirtió la trilogía original en un fenómeno cultural.
El casting ha resultado ser uno de los mayores aciertos del proyecto. Neeson, conocido por papeles dramáticos y de acción en películas como ‘La lista de Schindler’ (1993), de Steven Spielberg, ‘Star Wars. Episodio I: La amenaza fantasma’ (1999), de George Lucas, o ‘Venganza’ (2008), de Pierre Morel, sorprende al ponerse en la piel de Frank Drebin Jr., un personaje cómico. Más inesperada es la incorporación de Pamela Anderson como Beth, su compañera de investigaciones. La modelo canadiense irrumpió en el panorama mediático a finales de los 80, primero como imagen de marcas publicitarias, y poco después como playmate de la revista ‘Playboy’, lo que la catapultó al estrellato.