Un adolescente de 16 años en Kentucky, Estados Unidos, se quitó la vida tras ser víctima de una extorsión con imágenes falsas generadas por inteligencia artificial (IA). Elijah Heacock recibió mensajes que lo amenazaban con divulgar una imagen sexualizada suya, creada digitalmente, si no pagaba 3 mil dólares, según reveló su familia a CBS News en mayo de 2025
La tragedia ha puesto en el centro del debate el uso de herramientas de IA para crear contenido íntimo falso y chantajear a menores. Su padre, John Burnett, denunció la gravedad del problema: “Quienes persiguen a nuestros hijos están bien organizados, bien financiados y son despiadados. No necesitan que la foto sea real para causar daño”.
Sextorsión con IA: una amenaza en aumento
La muerte de Elijah encendió las alarmas de autoridades federales. El FBI reportó un “aumento espantoso” de casos de sextorsión contra adolescentes, sobre todo varones de entre 14 y 17 años, provocando una cifra “alarmante” de suicidios relacionados.
“El FBI ha visto un enorme aumento en el número de casos que involucran a niños y adolescentes amenazados y coaccionados para enviar imágenes explícitas en línea, un delito llamado sextorsión”.
FBI
Esta forma de chantaje solía estar asociada con figuras públicas. Pero hoy, cualquier menor con acceso a redes sociales es un posible objetivo.
Según un estudio de la ONG Thorn, el 6% de los adolescentes en EE.UU. ha sido víctima directa de imágenes íntimas generadas por IA.
Estas herramientas permiten simular con gran realismo desnudos que nunca existieron, pero que pueden resultar igual de devastadores para quienes aparecen.
Industria millonaria detrás de la sextorsión digital
La organización británica Internet Watch Foundation (IWF) detectó incluso la existencia de “manuales para pedófilos” que explican cómo usar estas herramientas para extorsionar a menores.
“Esta guía, que consiste en usar imágenes de abuso existentes para crear nuevo material, revictimizando aún más a los niños retratados. Se han identificado otras guías breves o de una sola página en circulación”.
IWF
Un caso citado por la IWF involucra a un individuo que reconoció haber chantajeado con éxito a niñas de solo 13 años.
El negocio detrás de estas aplicaciones es enorme. Un análisis de la publicación Indicator halló que 85 sitios web que ofrecen servicios de desnudez generada por IA podrían estar facturando hasta 36 millones de dólares anuales. De ellos, al menos 18 habrían generado entre 2.6 y 18.4 millones en solo seis meses.
Muchas de estas plataformas operan gracias a servicios de empresas como Google, Amazon y Cloudflare. Aunque algunas compañías han tomado medidas para bloquearlas, los sitios logran eludir los controles y mantenerse activos.
Casos en España y Reino Unido reflejan la dimensión global
El fenómeno no es exclusivo de Estados Unidos. En España, una encuesta de Save the Children reveló que uno de cada cinco jóvenes ha sido víctima de la difusión de imágenes sexuales falsas creadas sin su permiso.
En Puertollano, Castilla-La Mancha, la fiscalía investiga a tres menores acusados de usar IA para generar y compartir contenido pornográfico falso de sus compañeros y profesores.
El Reino Unido ya penaliza con hasta dos años de cárcel la creación de “deepfakes” sexualmente explícitos. En Estados Unidos, una legislación similar fue promulgada en mayo por el expresidente Donald Trump.
¿Qué hacen las plataformas tecnológicas?
Meta (Facebook, Instagram, WhatsApp) demandó recientemente a una empresa de Hong Kong creadora de Crush AI, una app que genera desnudos falsos. La compañía acusó a sus responsables de burlar repetidamente sus políticas de seguridad para anunciarse en sus plataformas
Pero los expertos aseguran que estas medidas no son suficientes. “Siguen surgiendo nuevas herramientas de desnudez. Son adversarios maliciosos y tenaces”, advirtió Indicator.
¿Qué se puede hacer?
Expertos retomados por la agencia francesa AFP recomiendan:
- Hablar abiertamente con los adolescentes sobre los riesgos en línea.
- Denunciar cualquier intento de sextorsión ante las autoridades.
- No ceder al chantaje.
- Guardar pruebas (capturas de pantalla, mensajes).
- Solicitar apoyo emocional o psicológico de inmediato.
La familia de Elijah ahora busca justicia, pero también advertir a otros padres sobre esta amenaza silenciosa que puede colarse en cualquier hogar con conexión a internet.