Redacción Macronews.— La reciente DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) ha dejado no solo daños materiales en Valencia, sino también una preocupante crisis sanitaria. Las autoridades han confirmado los primeros casos de leptospirosis, una infección bacteriana que se propaga rápidamente en áreas inundadas y que representa un alto riesgo para los residentes y voluntarios en labores de limpieza.
Riesgo de contagio en áreas inundadas
Las fuertes lluvias e inundaciones recientes han generado las condiciones perfectas para la propagación de la leptospirosis, una enfermedad provocada por la bacteria leptospira. Esta bacteria, común en zonas de agua estancada, se transmite al entrar en contacto con ambientes contaminados por la orina de animales infectados. En este contexto, la Albufera de Valencia y diversas zonas agrícolas afectadas por las inundaciones se han convertido en focos de infección.
Los casos confirmados han encendido las alarmas en la Comunidad Valenciana, que ha iniciado una campaña informativa sobre las medidas preventivas para evitar el contagio.
¿Qué es la leptospirosis y cómo se propaga?
La leptospirosis es una infección grave que puede transmitirse a través de contacto directo con agua, alimentos o suelos contaminados con la bacteria leptospira, presente en la orina de animales infectados como ratas, perros, gatos y caballos. Las ratas son especialmente reconocidas por ser grandes reservorios de esta bacteria, lo que incrementa el riesgo en eventos de inundación como los recientes causados por la DANA.
La transmisión de la leptospirosis a humanos es más común en entornos de emergencia climática, cuando se multiplican los espacios de agua estancada que facilitan el contacto con ambientes contaminados.
Síntomas y complicaciones de la leptospirosis
Los síntomas de la leptospirosis pueden confundirse fácilmente con los de otras infecciones febriles, lo que hace difícil su diagnóstico inicial. Entre los síntomas más comunes están fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular (especialmente en pantorrillas), ictericia e infección conjuntival.
Sin tratamiento, la enfermedad puede evolucionar a cuadros graves, como el síndrome de Weil, caracterizado por insuficiencia renal, ictericia y hemorragias, entre otros. En casos extremos, puede derivar en complicaciones pulmonares o neurológicas.
El periodo de incubación de la leptospirosis varía entre 5 y 14 días, aunque puede extenderse hasta 30 días. El diagnóstico se confirma a través de pruebas serológicas y la detección de anticuerpos específicos.
Medidas preventivas y recomendaciones sanitarias
Ante el aumento de casos, las autoridades instan a la población y a los voluntarios en áreas afectadas a tomar precauciones, como evitar el contacto directo con agua estancada y utilizar equipo de protección, incluyendo guantes y botas impermeables.
Estas medidas son cruciales en zonas con alta presencia de roedores o animales silvestres. Las autoridades también han reforzado los esfuerzos en la vacunación contra el tétanos y en la prevención de enfermedades gastrointestinales que, junto con la leptospirosis, representan una amenaza adicional en la región.
El brote de leptospirosis en Valencia marca un nuevo desafío en la recuperación tras las inundaciones, recordando a la población la importancia de seguir estrictas medidas de seguridad sanitaria.
CON INFORMACIÓN DE DINERO EN IMAGEN